La caída de un muro “secuestra” durante semanas un coche en la Rúa do Río, en el barrio de A Torre. En realidad, el problema reside en el mal estado de una finca, cuya entrada es compartida con otras viviendas. Unas cinco familias ya han presentado durante años escritos en el Concello de Vilagarcía, al que ahora piden que se agilicen los trámites para buscar una solución cuanto antes.
 

Lo que urge, en primer lugar, es arreglar el muro, que también da acceso a un vial público utilizado por los vecinos de A Torre. Temen que, en cualquier momento, vuelva a caer una piedra y que, en esta ocasión, los daños no sean solo materiales.
 

Hay casas que tienen dos entradas, pero en otros casos solo existe este acceso, ahora mismo muy limitado por la caída del muro. Y es que el vallado acorta la entrada, impidiendo la salida y entrada de vehículos, por lo que el coche de una de las familias lleva ya casi tres semanas aparcado en el exterior, sin poder moverse y teniendo que tirar de favores en caso de desplazamientos necesarios.
 

Diversos escritos

En cualquier caso, son varios ya los escritos que los vecinos pusieron en el Concello de Vilagarcía en los últimos siete años. Desde que se cayó el muro, hace unas semanas, la cuestión parece haberse movido algo más rápido en Ravella y tanto la Policía Local, como Protección Civil (que se encargó del vallado), como el concejal de Relacións Veciñais, José María González, se pasaron por la zona. 
El problema no reside solo en el muro, sino en el abandono de la finca. “Hay bicherío por todos lados”, explican. Pero la falta de seguridad se ve también en unos hierros oxidados que delimitan una antigua parra, y que temen que se desprendan en cualquier momento, como ya sucedió con las piedras del muro.
El incidente de hace unas semanas no fue, ni mucho menos, el único relacionado con esta estructura, que se encuentra en clara situación de desgaste. Las familias afectadas entienden que se trata de una cuestión que lleva un tiempo solventar, además de que es necesario requerir a los propietarios, pero piden al Concello que lo haga con toda la agilidad posible, ya que llevan años denunciando la falta de seguridad y de limpieza de una zona que afecta a su día a día.