Ravella cierra el Bianco por exceso de ruido y expedienta a la Ponderosa

Los cierres de bares continúan en Vilagarcía. Ravella comunicó ayer el precinto del Bianco, en el barrio de O Castro, y de la Ponderosa, en Bamio. En ambos casos, la actuación viene marcada por las quejas de los vecinos y tras realizar “as pertinentes medicións sonométricos no interior das vivendas”, aseguran fuentes municipales.

A principios de esta semana, el Concello comunicaba otros tres cierres a los que ahora se suman, en pleno fin de semana, el del Bianco. La administración local apela a la necesidad de compatibilizar la actividad de hostelería, y en concreto el ocio nocturno, con “os dereitos da veciñanza, en especial co relativo ao descanso”.

En el caso del Bianco, es a raíz de las quejas de los vecinos por lo que fueron a realizarse las mediciones, a través de una empresa privada contratada por el Concello. Las mediciones se hicieron en dos días, registrándose en el segundo día el nivel mayor de ruidos, con 56 decibelios. Cabe recordar que el límite se sitúa en los 25.

En cuanto a la medición realizada en el establecimiento de Bamio, que Ravella señala que se hizo en el interior de la vivienda colindante, fueron 47 los decibelios. “Nos dous casos a falta cometida está tipificada como grave, para a que se prevén multas de entre 601 e 12.000 euros”.

Malestar en el sector

Las medidas adoptadas por el Concello en los últimos tiempos están causando el malestar y la preocupación del sector, sobre todo porque los cierres se llevan sin previo apercibimiento y de una hora para otra. De hecho, el precinto del Bianco se llevó a cabo ayer por la tarde. Al igual que en los casos que se dieron a conocer a principios de semana, Ravella actúa en pleno fin de semana, lo cual también genera críticas entre los hosteleros y, en concreto, en la asociación que los representa. De hecho, Ahituvi ya pidió una reunión con el gobierno local para abordar este problema, que va cambio de convertirse en conflicto. A este respecto, desde el ejecutivo socialista señalan que “tras numerosos chamamentos ao sector para que fixeran compatible a súa actividade co benestar dos cidadáns, o Concello tamén actúa contra os que infrinxen a normativa para evitar agravios cos demais hostaleiros que si insonorizan os seus locais e cumpren as normas, que ademais son a maioría”.