OTRA TOMADURA DE PELO

En el último Pleno Municipal se acordó, entre otras cosas, que el Alcalde se reuniría con los portavoces de los distintos partidos políticos así como también conmigo en representación de la ASOCIACION POLA DEFENSA DO PATRIMONIO DE VILAGARCÍA. Entendía yo, que dicha reunión sería para consensuar, entre todos, la dichosa y definitiva ubicación del Obelisco colocando éste en el sitio que la mayoría decidiese.  Ha cumplido su palabra el Sr. Varela. Nos ha convocado a la reunión mentada y ha tenido la gentileza de darme la palabra para exponer, nuevamente y como había dicho en el Pleno, los argumentos de peso en que se basa nuestra propuesta de colocar el Obelisco en la Plaza de Galicia. Como lo que yo había explicado en el Pleno era ya todo lo que se podía decir, me limité, prácticamente, a repetir lo dicho, es decir, que la plaza es amplia y diáfana, que no molestaría a nadie, que se trata de un monumento propio de una plaza y no de una calle, que remarca el centro de la ciudad, que daría esplendor al mismo al verse este  prácticamente desde cuatro calles, que era petición de muchos ciudadanos  y otra cosa importante; que ya se había gastado dinero público (de nuestros sufridos impuestos) en las obras iniciadas para su ubicación decretada por el gobierno anterior. Creía que estos argumentos eran merecedores de un mínimo de atención cuando se quiere actuar bajo el manto de la concordia y la democracia pero mira por donde, al final de mi lectura se da la palabra al historiador Sr. Villaronga, al que ciertamente admiro, el cual nos da una profusa  clase de Historia desde los tiempos de Maricastaña  haciendo mención a una serie de obeliscos, torres del reloj u otros nombramientos de sitios o lugares que no recuerdo y que nada tenían que ver con la propuesta de la Asociación de Patrimonio pues yo hablaba del futuro de Vilagarcía  y de colocarlo donde nació.  Como en una reunión anterior se nos había dado una infografía del Obelisco en la calle Rey Daviña, hice yo lo propio con otra en la Plaza de Galicia (Que rogaría al Diario de Arousa publicase para que los vilagarcianos puedan comparar). La decepción, por mi parte, ha sido mayúscula al comprobar que se nos había preparado una encerrona,” muy democrática ella” pues,   cuando solicité se llevase de nuevo este asunto a Pleno, se votase y se colocase donde pidiera la mayoría, me espetó el Sr. Varela que la “decisión última era de la Corporación Municipal” . ¿Entonces para que nos ha convocado?  pregunté yo ingenuo y hasta pensé:  Debió de ser para decirnos  ¡Aquí se hace lo que yo diga! ” . Pues muy bien Sr. Varela eso no es democracia eso es prepotencia  y por ello le tengo que decir  que esa reunión ha sido una pantomima, otra tomadura de pelo a lo que,  en verdad, no estoy acostumbrado a soportar y de ahí el contenido de este escrito. No se trata  de recurrir al pataleo, faltaría más, sino de dar a entender  a los vilagarcianos lo que ha ocurrido haciendo Vd. un  uso extremo del “ordeno y mando” en contra del sentir de muchos. Por último, felicitar efusivamente a los propietarios de los edificios de la Calle Rey Daviña donde se va a colocar el monumento porque no necesitarán reloj en su casa; se asoman a la ventana y aproximadamente a  cinco metros (+/-) tendrán un reloj municipal para que puedan ver la hora y, en caso de avería, dada su proximidad,  hasta le podrán dar cuerda.