¿Hubo Covid-19 en la Casa Blanca, o no?

esultan de una irresponsabilidad supina las declaraciones del presidente Trump diciéndole a los ciudadanos “que no tengan miedo al coronavírus”, animándoles a seguir transgrediendo las unánimes recomendaciones de la comunidad científica.
Estas declaraciones del presidente del imperio mundial de EE.UU. demuestran hasta dónde nos está llevando este político. Trump sigue manteniendo y haciendo proclamas negando la importancia de la pandemia desde el primer momento, sin importarle los más de 210.000 muertos y millones de infectados en EE.UU. Sus declaraciones son tan peligrosas para la humanidad como la guerra misma.
Trump sigue aprovechándose de la buena fe y la ignorancia de gente que cada vez va en aumento dada la mala calidad de personajes como este que aborrega parte de la población que votan a personas menos racionales y las más escandalosas.
Vete tú a saber si este showman hizo una operación de marketing político en tiempos electorales que tan bien resultado le dio en las elecciones anteriores. En el supuesto contagio no dudó en dar paseos triunfales con el coche exhibiendo su careto para demostrar que eso de la pandemia solo lo creen los ignorantes que le votan sin percatarse de que el Presidente dispone de todos medios que ellos no tienen para tratar la pandemia como tampoco la tuvieron los más de 210.000 muertos caídos por ella. El regreso rápido a la Casa Blanca deja dudas, dado que el personaje se dedica al espectáculo. Cuando todos los dirigentes se están devanando los sesos para atacar la pandemia, resulta que el poderoso presidente sigue despreciando a todo el mundo.
Con estos golpes de efecto puede volver a ganar las elecciones aún con menos votos que su rival, pero ya tiene asegurado la mayoría en la Corte Suprema que le pueden dar la presidencia como en su día le dio a Bush con los votos de Florida aún ganando Gore.
La entrada de Trump en el hospital no será una operación de marketing político para volver a ganar las elecciones. Pero aún siendo verdad, decir que no hay que tener miedo al coronavirus es temerario porque, aunque el salió  vivito y coleante, no todos disponen de los medios que él, por eso murió y seguirá muriendo mucha gente por falta de medios.
Hubo otro presidente del Reino Unido que en un principio se burló de la pandemia haciendo campaña, pero al ser abordado por el Covid-19, —que a punto estuvo de quedar fulminado— cambió de idea y de lenguaje, tomando en serio la pandemia. Y está luchando para combatirla. Pero este showman de Trump no cambió de discurso, por lo que es de suponer que su enfermedad fue fingida para ganar popularidad para alcanzar sus objetivos electorales.  
Como  la nueva política está basada en la mentira,  el riesgo  es posible, que vuelva a ganar por falta de civismo de él y sus acólitos aumentando la grave crisis provocada por su irresponsable arrogancia cambiando valores consolidados.