El delegado territorial de la Xunta en Pontevedra, José Manuel Cores Tourís, inspeccionó ayer los trabajos finalizados de construcción de una rotonda en la PO-531, en el lugar de Curro, donde inicialmente estaba previsto el llamado nudo pequeño, con un paso subterráneo.
Las obras finalmente ejecutadas consistieron en la construcción de una glorieta al mismo nivel, de 30 metros de diámetro, además de la instalación de señalización, iluminación y red de pluviales. A mayores, el vial alternativo abierto durante la ejecución de los trabajos será ahora aprovechado para su conversión en una zona de esparcimiento, avanzó Tourís, con área de aparcamiento para 14 vehículos y plaza para autobús. Además, se tiene previsto ejecutar en el entorno una senda peatonal de unos 80 metros de longitud, delimitada por una barandilla de madera.
La inversión total ronda los 850.000 euros, incluyendo obras auxiliares para el ensanche y pavimentación de un camino de servicio paralelo a la general. Las obras fueron ejecutadas por la Unión Temporal de Empresas Enlace Curro (Construcciones Obras y Viales SA y Bruesa Construcciones SA). Tanto el alcalde de Barro como el portavoz vecinal agradecieron la actuación de mejora en el entorno.