A menos de ocho meses de las próximas elecciones municipales, los partidos empiezan a mover ficha sobre sus candidatos y estrategias políticas para ganar la Alcaldía cambadesa. El BNG fue el más tempranero; eligió a Víctor Caamaño como su candidato  en julio y por cuarta vez. El PP, por su parte, también repite alcaldable con Luis Aragunde y lo confirmaba hace unos días, mientras que Somos ha abierto un periodo de primarias al que, de momento, solo se ha presentado su cabeza de lista de 2015, Tino Cordal. Así las cosas, y mientras que Ciudadanos decide si su flamante coordinador local, Sergio Abal Varela, es finalmente la opción elegida para su estreno en la villa, las incógnitas más importantes están en la alcaldesa socialista, Fátima Abal Roma, y el concejal de Cambados Pode, José Ramón Abal Varela. 
En el partido del puño y la rosa se tiene por costumbre convocar un congreso local donde se midan sus candidatos y también de celebrarlo hacia finales del año anterior a la cita con las urnas. Sin embargo, Abal Roma aclara que en las agrupaciones locales donde se ostenta la Alcaldía no se celebran primarias, así que “en caso de postularme sería eu”, añadió. Sin embargo, no lo tiene claro, “aínda non o teño decidido e primeiro teño que falar cos meus compañeiros”. 
Su gobierno en coalición con BNG, Somos y Pode no está siendo un camino de rosas. Las últimas crisis han dejado una cosa clara entre los socios: cada uno gestiona sus competencias sin interferencias y, aunque las formas son las correctas incluso con comparecencias conjuntas en proyectos compartidos, esta forma de trabajar está dando alas a sus rivales políticos. 
Uno de los protagonistas de abandonar con amenaza de ruptura incluida ha sido el edil de Pode. El motivo casi siempre ha sido la peatonalización de Fefiñáns; algo que el resto de miembros de la coalición sacrificaron en aras de arrebatar casi 30 años de mayorías absolutas del PP. Ninguno de los socios reniega del cuatripartito hasta el punto de manifestar que no repetirían pues creen que, aún así, el modelo supera al popular. No obstante, ninguno renuncia a gobernar en solitario y es por lo que van a pelear.
Su portavoz y alcaldable en 2015 asegura que ahora mismo están “centrados no día a día do Concello e non queremos despistarnos co tema das eleccións porque hai tempo”. De hecho, Abal Varela asegura que hasta Navidad quedan unos meses de intenso trabajo en la ejecución de proyectos importantes y hasta que “non estean finalizados ou encamiñados” no va a pensar en otra cosa. Con todo, “penso que imos polo bo camiño, conseguimos importantes resultados nestes casi catro anos de mandato e a sensación entre os veciños son boas, o percibimos na rúa”, añadió. El edil no dio ni una pista de si tiene intención de repetir e insistió en que “primeiro os deberes” y luego la reunión con su partidos para tomar la decisión, aunque Pode quedó muy tocado tras el abandono de su hermano, ahora en Cs, y otros compañeros descontentos con su gestión y con sus propias aspiraciones políticas. l