El hotel “Augusta Resort”, el establecimiento de Sanxenxo que, según el Concello, celebró una fiesta de Nochevieja incumpliendo diversas normas anti Covid, ha emitido un comunicado público en sus redes sociales en el que niega los hechos. El establecimiento hotelero apunta que “es radical y absolutamente falso que se celebrase una fiesta de fin de año vulnerando la normativa legalmente establecida en materia de seguridad y contraviniendo las normas relativas a la protección frente a la Covid-19”.

El Augusta señala que lo que se organizó fue una cena de fin de año “exclusivamente para los clientes que estaban alojados” y apunta que el número de personas que estaban en el hotel era de 35 adultos, seis niños y un bebé que cenaron en un comedor que tiene una capacidad para 270 personas, “lo que representa un aforo de menos del 15 %”. En este sentido aseguran desde el establecimiento de Sanxenxo que “las mesas se distribuyeron cumpliendo rigurosamente con las determinaciones y requisitos de seguridad y distancias legalmente establecidos”. A mayores apuntan que la cena estuvo amenizada con música ambiental  y que en ningún momento hubo ni aglomeración de comensales ni tampoco baile y que “se respetaron, en todo momento, las distancias de seguridad”.

El Concello apuntaba al denunciar la citada fiesta que ya días antes de Fin de Año una patrulla de la Policía Local se había personado en el hotel para advertir de que no estaban permitidas este tipo de celebraciones. Desde el hotel señalan que sí, que el pasado día 28 los agentes municipales se personaron en las instalaciones, pero dicen que “sin especificar si se estaba produciendo algún tipo de incumplimiento por nuestra parte” y que el día 30 volvieron para “entregar en mano a la dirección del hotel un Requerimiento de salud pública firmado por el jefe de la Policía Local”. Según el Augusta ese mismo día dirigieron un escrito al alcalde, Telmo Martín, en el que aseguraban que no habría ninguna fiesta de fin de año, “ni habrá baile con barra libre”. Dicen que “estas previsiones nunca se anunciaron y son falsas”. Añaden también que su actitud siempre fue de colaboración con la Policía Local facilitándoseles “el acceso libre a todas las instalaciones y dependencias, así como la información que requirieron”. Insisten además en que no les consta ni denuncia ni notificación alguna por parte de las autoridades y que emprenderán las medidas legales que sean necesarias ante lo que consideran un “atropello a la verdad”.

Lo cierto es que, ya al margen de la existencia o no de una fiesta con cotillón, las restricciones activas con motivo de la crisis de la Covid-19 son claras y no permiten desplazamientos (con o sin pernoctación) si no son por causas debidamente justificadas como las laborales o, durante esos tres días señalados, visita a familiares o allegados. La veintena de personas denunciadas por la Policía Local de Sanxenxo en zonas próximas al hotel procedían de diferentes puntos de Galicia y no pudieron demostrar esas citadas causas. De hecho en el propio hotel se interceptó a una pareja del Barco de Valdeorras que, según el Concello, no pudo acreditar las causas tipificadas como permitidas en esta situación de pandemia. De ahí que se enfrenten a multas de hasta 600 euros y de más para aquellos que no atendieron a las directrices de los agentes y optaron por no volver a sus casas.