Las quejas de los feriantes en relación con deficiencias detectadas en donde instalaron sus atracciones de feria, barracas y puestos de venta para las fiestas de verano de Ribeira no cayeron en saco roto. De hecho, el Concello instaló 150 metros de vallas para separar la zonae de tráfico de vehículos de los referidos negocios, algo que los feriantes señalaban que suponía una situación de grave riesgo. Aunque señalan que no se actuó de igual modo en el otro margen de la calzada, en donde hay puestos de venta y una carpa donde comer pulpo, consideran que, al menos, se les ha tenido en cuenta.

Advierten que se ha avanzado algo en seguridad, sobre todo en cuanto a la separación entre los diferentes negocios, pero apuntan que todavía quedan cosas por hacer, pues no se debe permitir que haya mangueras de luz al descubierto por medio de los pasillos, entre otras situaciones irregulares que indican ya irán saliendo a la luz. Parecen estar satisfechos también por lo que señalan pudiera ser un compromiso por parte del Concello de que el próximo año esté todo mejor ordenado y organizado, marcando la parcela de cada atracción. De todos modos, creen que desde la Administración local ribeirense se debería dar de manera decidida un paso firme para ponerse al frente de la organización de las fiestas y evitar que buena parte del dinero que se genera en por la instalación de las atracciones y puestos de venta no se pierda en intermediarios, y se puedan hacer mejores fiestas.

Como estaba previsto, Bomberos y GAEM de Ribeira realizaron ayer una inspección ocular del recinto ferial. Según fuentes de Protección Civil, se detectaron dos zonas en donde no pueden acceder con el vehículo de rescate en altura, concretamente en donde se sitúan la montaña rusa acuática Cataratas, y la atracción de “La Uve”, por lo que se solicitó a la comisión de fiestas que gestionase la retirada de los obstáculos que impiden esa entrada a ese lugar en donde están las atracciones más elevadas. Y se solicitó la retirada de vehículos de la rampa de varada, que impedían el paso. l