El Gondomar, rival del Arosa el domingo en el campo de As Gaiandas, es el equipo revelación de Preferente. Un recién ascendido que ocupa la segunda plaza con 50 puntos. Al frente del equipo de Val Miñor está Marcos Montes, que se está destapando como uno de los técnicos más prometedores de la provincia. Tras lograr el ascenso la pasada campaña por detrás de Valladares y Unión Grove, el Gondomar se ha convertido en uno de los rivales más fuertes de la competición, con una regularidad destacada, sobre todo como local, donde ha ganado sus últimos 7 encuentros. Solo en el duelo fraternal en los banquillos ante el Choco los de Marcos Montes ganaron por la mínima, los otros seis últimos equipos se marcharon goleados de As Gaiandas.

A falta de 12 partidos para el final de liga el Gondomar ha cumplido su objetivo, la permanencia, y no parece dispuesto a descabalgarse tan fácil de las primeras plazas. “Partimos con el objetivo de llegar a 45 puntos cuanto antes, en los 4 primeros partidos cosechamos 3 derrotas, lo que no supuso ningún trauma. A base de entrenar, manejar informes de los rivales y un par de victorias puntuales con goles en el tramo final cogimos una racha que nos dio tranquilidad y confianza, a partir de ahí granito a granito hemos llegado hasta donde estamos” explica el técnico. “El equipo está muy fuerte en casa, el campo nos va bien, tiene dimensiones pequeñas y somos capaces de manejarnos en juego combinativo y directo de igual manera”.

El Gondomar tiene una plantilla con jugadores de la zona. Las altas esta temporada fueron Nando (Pontellas), Jacobo y Toni (Moaña), Lucas (juveniles), y Liboreiro, Víctor, Pibe y Breixo (Tomiño). Este último es el máximo artillero del equipo, con 13 goles, pero ante el Arosa será baja. “El equipo está con muchas ganas tras perder contra el Mondariz, lo estoy notando en los entrenamientos, creo que vamos a salir ante el Arosa muy enchufados, este equipo tiene mucho orgullo”.

Marcos Montes explica que el campo de As Gaiandas está en perfectas condiciones y que cerca de 250 aficionados les respaldan cada domingo. El Gondomar es ambicioso a la vez que humilde. “No hay vértigo por la clasificación, tenemos los pies en el suelo, en el momento que no nos ponemos el mono de faena no hacemos nada”. En Gondomar esperan a un Arosa “que vendrá a sumar de 3 en 3, es un partido muy importante para ellos, al Arosa no lo eliminé nunca de las quinielas para ascender por la plantilla que tiene, creo que será un partido cerrado, con pocas ocasiones donde el balón parado será determinante”.