Las bodegas Condes de Albarei  en Cambados celebraron ayer su tradicional “Festa do Socio”, un acto en el que se premia a los mejores productores de la anterior añada y que sirve como jornada de confraternidad entre todos los integrantes de una de las marcas que funciona como buque insignia de la Denominación de Origen Rías Baixas.
La cita central volvió a ser una comida de hermandad en los salones de la bodega, donde se dieron cita más de 700 comensales. En la sobremesa llegó uno de los momentos más esperados, con la entrega de distinciones a los productores cuyas cosechas destacaron y fueron reconocidas por su calidad y excelencia.
En la presente edición hubo novedades en este capítulo, explicaban desde la entidad.
En lugar de recurrir a un primer, segundo y tercer puesto, como se hizo en los años precedentes, se impusieron tres primeros premios, atendiendo a diferentes categorías. Porque no es lo mismo, apuntaban, mantener esta excelencia con una producción de 6.000 kilos que con una de 600.
Así pues, se hizo un reconocimiento al mejor productor en función del número de kilos de uva cosechados.

premiados
De esta forma, en la categoría de cero a 3.000 kilos fue galardonado Fernando Cores; en la de 3.000 a 8.000 kilos se distinguió a María del Carmen Bouzada y en la que atiende a una producción de más de 8.000 kilos se premió a la comunidad de bienes RBC.CB.
Los actos de la jornada de ayer comenzaron a mediodía, con la salida de todos los invitados hacia la capilla de María Auxiliadora. Allí, a la una de la tarde, se ofició una misa. La comida de socios se fijó para las dos y media, en la que no faltó la buena gastronomía y, como no podía ser de otra forma, tampoco los mejores vinos de la casa.
La bodega celebra este año su vigésimo sexto aniversario, con ventas en más de cuarenta países en todo el mundo pero sin olvidar el acto de reconocimiento a sus productores, sin los que no se conseguirían todos los éxitos.