Una década ya creando escuela en Vilagarcía

Una década ya creando escuela en Vilagarcía
La Escola Deportiva Arousa cuenta esta temporada atípica marcada por el covid con solo seis equipos en competición | da

La Escola Deportiva Arousa cumple diez años, completamente afianzada como alternativa de calidad en Vilagarcía para iniciarse y recibir una buena formación futbolística. La “EDA” nació hace una década como consecuencia de las discrepancias surgidas en la Junta Gestora del Arosa. Un grupo de padres, que eran en su mayor parte directivos, optaron por fundar un nuevo club de cantera, cimentado en un primer momento en un equipo alevín (una de las mejores camadas que dio el club arlequinado) y otro prebenjamín. Pocos esperaban que aquello tuviera el recorrido que ha logrado.


Solo en el primer año el club logró tres ascensos, ya que el equipo alevín compitió también en categoría infantil. “A partir de ahí todo fue creciendo hasta alcanzar su plenitud cuando hace un par de años el cadete jugó en División de Honor”, explica Luis Treviño, que tomó las riendas de la coordinación desde la segunda temporada de vida de la EDA y sigue nueve años después al frente de la misma. “A día de hoy tenemos a los infantiles y a los cadetes en Gallega, seguimos intentando crecer pero es difícil porque estamos en medio de trasatlánticos, de canteras de clubes como Ribadumia y Arosa”.


Diez años de siembra han dado frutos en forma de futbolistas que han alcanzado categorías nacionales. Hay varios ejemplos. Martín Diz, que tras su paso por la base del Celta se ha afianzado en el Pontevedra como una pieza importante en Segunda B. El ribadumiense Luis Castro, a pesar de ser todavía juvenil, ya ha jugado con el primer equipo del CD Lugo, tanto en liga en Segunda División como en Copa del Rey. O el isleño Toño Otero, que debutó en el Compostela esta temporada.


Equipo femenino pionero

Y son varias las jugadoras que formaron parte del pionero proyecto que puso en marcha la escuela junto al Atlético Arousana en 2014 que militan en la actualidad en Primera Nacional: Carla Piñeiro y Ana Feijoo (Umia), Almudena Agra (Atlético Arousana), Tania Cores, Laura Iglesias y Uxía Abalo (Viajes InterRías FF). Todas ellas fueron partícipes del primer equipo femenino alevín que jugó liga federada en el sur de Galicia y fue el primero también en disputar el Torneo Internacional Arousa Fútbol 7.


En la actualidad la EDA maneja en una temporada normal una decena de equipos, pero este año debido a la Covid son solo seis los que están en liza porque ni benjamines ni prebenjamines se animaron a competir. Se trata de dos alevines, dos infantiles y dos cadetes. El gran caballo de batalla de la escuela es dar continuidad a los chavales una vez cierran su etapa cadete. “Muchos se van porque tienen nivel y los llaman de todas partes, son jugadores ya juveniles que gustan y cuesta retenerlos”. Un ejemplo es Nico Fernández, que es uno de los jugadores más destacados del Arosa juvenil en Liga Nacional y ya debutó la pasada temporada en Tercera División. Al margen de otros como Alejandro y Nico, que están en el Celta, o Samu y Marcelo (Ribadumia).


“Solo tuvimos equipo juvenil un año, cuando hicimos el convenio con el Atlético Faxilde, pero la experiencia no fue buena porque la imagen que dio el equipo no era lo que buscábamos”, explica Treviño. Escola Deportiva Arousa y Faxilde retomaron las conversaciones esta temporada para ir de la mano “e intentar hacer un equipo de juveniles que puedan dar el salto después al Faxilde”. Ambos clubes comparten instalación en el campo de A Pelada, donde se instaló la EDA hace cinco años cuando dotaron de hierba sintética al terreno de juego. “El trato que nos dan aquí es espectacular, tenemos una instalación buena y cómoda”, comenta el coordinador.


Clave del éxito

Una de las claves del buen funcionamiento de la escuela es el nivel de los entrenadores que trabajan o han pasado por la misma. Nombres como los de David López “Perú”, Ricardo Fernández, Tino Buján, Ricardo Dios o el propio Luis Treviño, al margen de Roberto Pazos (entrenador de porteros) o Mario Da Silva y Miguel Cores, que son los actuales preparadores físicos del Ribadumia en Tercera División y del Pontevedra B respectivamente. “Somos una escuela humilde, no tenemos ni un solo patrocinador, este 

año dimos un paso importante al firmar con Nike”.


Los alumnos de la EDA pagan 300 euros al año y reciben formación y toda la ropa deportiva. “Nuestro objetivo es llegar a 150 jugadores, no más, para poder ofrecer una buena formación a través de buenos entrenadores, buen material para entrenar y una buena instalación con el objetivo de que estos chavales tengan un buen recuerdo de su paso por la escuela”.


Además, durante el verano la EDA lleva a cabo una escuela de tecnificación y ocio con la que prorroga la formación de sus jugadores, abierta también a todos los niños y niñas que quieran disfrutar de fútbol, diferentes actividades de ocio y jornadas de convivencia durante los meses de julio y agosto.

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