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jueves | 25 abril | 2024
Una vez más y por segunda vez en este año el sector del mar y diversos colectivos ecologistas exigen a la Xunta de Galicia que haga cumplir a Explotaciones Gallegas la legislación vigente sobre la restauración de la antigua mina de Touro. Un total de 56 colectivos se sentaron ayer en A Illa para denunciar públicamente que nada ha cambiado en los últimos meses y que “as actuacións que cita a empresa como realizadas nos últimos tres anos son actuacións sobre o papel, que nunca se levaron a cabo na realidade”. Y es más, creen que detrás del proyecto de drenaje integral que la firma concesionaria ha presentado recientemente ante la Xunta se esconde la intención de proceder a la reapertura del espacio minero.
Respecto a las tareas pendientes desde el sector del mar habla Xaquín Rubido de la Plataforma en Defensa da Ría de Arousa (PDRA). Él señala que ni se ha modificado el sistema de gestión de augas ni se ha garantizado mediante un Plan Integral que no se están vertiendo elementos contaminantes a los ríos que pasan por la zona y que desembocan en el Ulla y, por consiguiente, en la Ría de Arousa. Reclama la PDRA que la empresa debe presentar un Plan de Xestión de Residuos y también un proyecto de restauración que todavía no ha puesto sobre la mesa, según denuncian.
“Explotaciones Gallegas estima dabondo as medidas, mais a administración galega denegou no seu momento o permiso de vertedura das augas da balsa polas altas cantidades de metais pesados que presentan e por non considerar suficientes as solucións que agora a empresa volta a propoñer”, explican desde los colectivos ecologistas y del mar.
A todos les sorprende que en reciente proyecto de drenaje la empresa concesionaria incluya la creación de plantas de tratamiento de aguas cuando este solo sería un trámite necesario en caso de que la mina se reabriese.
Desde la Plataforma Vecinal contraria a la Mina de Touro Julia Barbosa indica que “eso nos da a entender que la verdadera finalidad de este proyecto y el objetivo real de la empresa es retomar la actividad minera”.
En opinión de los colectivos en contra de la mina, “el actual proyecto de drenaje integral debe estar incorporado a un verdadero plan de restauración” y tener como objetivo único “asumir los pasivos mineros y resolver el problema de contaminación existente en la actualidad derivada de la anterior explotación”. Solicitan pues que este plan de restauración esté desligado de cualquier futuro proyecto que se pueda presentar para la explotación minera ya que, explican, “conforme a la directiva europea, la restauración es previa a cualquiera nuevo proyecto de explotación”.
