Las familias con hijos con autismo se quejan de que les es muy complicada la conciliación porque, según indican los afectados, no los admiten en muchas actividades con todo lo que ello conlleva para compaginar el trabajo con el cuidado de los niños. Es preciso, pues, que se incrementen los esfuerzos en concienciación y que las administraciones se apliquen en la iguadad de oportunidades.