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viernes | 26 abril | 2024
Después de que el pasado sábado se puso en marcha por el Concello ribeirense una campaña para obligar a los vendedores ambulantes a recoger los residuos que generan durante el mercadillo, llegó la hora de hacer un primer balance. La satisfacción por parte del edil de Benestar Comunitario, Persoal, Mercados e Consumo, Emilio Pérez, en relación a como quedó la explanada portuaria en la que se desarrolla ese evento no podía ser mayor, llegando a decir que “todo quedó perfectamente limpio”. Además, responsables municipales calificaron de “exemplar” y “cívico” el comportamiento de los feriantes a la hora de no dejar basura en el recinto, y esperan que tenga continuidad y los vendedores mantengan ese hábito, “que es el gran objetivo que se persigue”, algo en lo que la Policía Local estará vigilante.
Los agentes municipales que repartieron entre los vendedores el comunicado en el que se les obligaba a recoger su basura en unas determinadas condiciones, ya pudieron comprobar el exquisito comportamiento de los ambulantes, que incluso llegaron a solicitarles que la Administración local o la empresa concesionaria del servicio de limpieza viaria y recogida de basura instalase algunos contenedores más pues varios de ellos quedaron a rebosar. Para llevar a cabo esta medida, la adjudicataria reforzó la dotación de los contenedores que ya se instalan en ese entorno del Malecón con otros ocho recipientes, y a partir del próximo sábado se colocará uno más a la altura del bar Bahía, optimizando la distribución de los contenedores.
El encargado de la concesionaria del referido servicio quedó gratamente sorprendido de la imagen que presentaba a la conclusión del mercadillo la zona portuaria donde se instalan los puestos de venta ambulante. Fuentes municipales indicaron que funcionó “tan bien” que todos los residuos fueron a parar a los contenedores, de los que la concesionaria recogió 1.660 kilos de basura del mercadillo. Además, ni tan siquiera hicieron uso de otra de las opciones que se les ofrecía para deshacerse de los residuos, que era la de dejar todo bien recogido y atado en el puesto que ocupan semanalmente, para que no se lo llevase el viento y quedase todo esparcido por la ciudad o fuera a parar a la dársena.
En este sentido, desde el Concello indicaron que, además de dejar todo más limpio, se consigue el objetivo de proteger el medio ambiente, dado que el mar está al lado y el riesgo de contaminación por esos residuos es elevado. Recordó que ya hubo otros intentos de conseguilo, pero ninguno de ellos fructificó o tan sólo se logró parcialmente o con la misma eficacia que ahora.
