Dan luz verde ambiental a los cambios urbanísticos para el polígono industrial de Espiñeira

La Xunta de Galicia ha dado luz verde ambiental a una recalificación en el urbanismo de Boiro con respecto al polígono de Espiñeira para facilitar y adecuar el desarrollo de las empresas en el mismo y las necesidades de espacio de éstas.
Con esta modificación se pretende ajustar a las circunstancias actuales y reales tanto la altura máxima como los retranqueos (distancia mínima que se exige a las construcciones a la hora de edificar) en el polígono, “adaptándola a la legislación más moderna y reciente”, según señala la Xunta. Así pues, mientras que la normativa hasta ahora limitaba a dos las plantas de las naves, la modificación permitirá construir tres. La altura de la cornisa pasa de nueve a trece metros y la de la cubierta de once a dieciséis. En cuanto a retranqueos, en parcelas con largo medio superior a 50 metros, podrán pasar de siete a cinco metros.
La Xunta explica que las normas vigentes se remontan a 2003 y 1998, “momentos en los que resulta evidente que la caracterización, configuración y determinaciones previstas por los instrumentos de ordenación para el uso industrial respondían a unas necesidades distintas a las que hoy se presentan y que se han visto superadas por un sector, el industrial, que se ha modernizado, a la par que la tecnología de la que se sirve, a una velocidad vertiginosa en la última década”.
La Consellería de Medio Ambiente concluyó que esta recalificación obedece al “interés público” y no requiere ser sometida a un trámite ordinario de Evaluación Ambiental, algo que hubiera dilatado los plazos pero que solo se reserva a cambios urbanísticos que puedan causar especial alteración en el medio ambiente.  l