Denuncian a un bar de Ribeira por permitir salir a los clientes a la vía pública con consumiciones

La capital de O Barbanza volvió a vivir este domingo una madrugada de movida nocturna con un buen número de infracciones por parte de media docena de locales de hostelería, que se suman a los otros dos que fueron sancionados en la noche del sábado. La Policía Local, que contó únicamente con dos patrullas de guardia, cada una de ellas integrada por un agente y un auxiliar, denunció a cuatro establecimientos por incumplir el horario de cierre -uno de ellos por tener la terraza montada y con clientes en los juegos de sillas y mesas por encima del límite de tiempo-, tres de ellos ubicados en Bandourrío, en el Malecón y en sus alrededores, y otro en la parroquia de Castiñeiras. 

Además, los policías locales denunciaron a un negocio de ocio de la ciudad por la celebración en la vía pública de un concierto para el que no tenía autorización, y que estaba causando molestias, dándose la circunstancia de que es reincidente en ese tipo de infracción. Igualmente, los agentes municipales denunciaron a otro local de Bandourrío por permitir salir a su clientela con los vasos de sus consumiciones a la vía pública, además de no contar con gel hidroalcohólico ni cartelería. 

En el momento en que la Policía Local ribeirense realizaba controles en los locales se llegaron a contabilizar más de 400 personas en la Rúa Manzanares y su entorno, a la altura de la Praza de Pontevedra. Otra de las incidencias detectadas en la noche de ayer que dos menores de edad fueron sorprendidos arrancando plantas en los jardines creados en la superficie de la antigua estación de autobuses. En este sentido cabe recordar que el fin de semana pasado aparecieron tiradas en el suelo todas las jardineras del tramo peatonal de la Rúa de Galicia entre las plazas de Compostela y Porta do Sol.