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martes | 14 mayo | 2024
Conos, puntos numerados en la calzada, cámaras de vídeo y de fotografía, uniformados sobre el terreno, reproducciones en 3D y un coche patrulla grabando y realizando frenazos de todo tipo en la carretera fueron algunas de las actuaciones realizadas en la mañana de ayer por los especialistas del Equipo de Reconstrucción de Accidentes de Tráfico procedentes de Madrid en el lugar en el que en el mes de mayo falleció una joven pareja como consecuencia de un brutal accidente en la AC-305 en Palmeira, justo en el límite entre los municipios de A Pobra do Caramiñal y Ribeira.
Para completar la investigación que se está llevando a cabo, los agentes supervisaron también el estado en el que quedaron los dos vehículos implicados en el accidente y hacerse así una composición de lugar más exacta en el momento en el que desgranen los datos obtenidos ayer sobre el terreno.
La meticulosidad de los agentes era notoria, puesto que ponían especial cuidado en respetar las distancias y en reproducir con exactitud los puntos de las frenadas, del impacto y el lugar en el que quedaron los vehículos a tenor de la primera toma de datos el día del trágico siniestro.
Para poder llevar a cabo esta labor fue necesario cortar la carretera, motivo por el que se produjeron algunas retenciones que fueron solventadas sin mayores inconvenientes por los propios agentes de Tráfico desplazados al lugar.
La meticulosidad de la investigación quedó patente con la medición a través de láser y las reproducciones en tres dimensiones.
El resultado de la reconstrucción del accidente será un dato esencial en el proceso abierto que se sigue contra la conductora del otro turismo implicado, para la que la acusación particular pide condena de cárcel.
El siniestro mortal se producía pasadas las 18:30 del pasado 4 de mayo. En el siniestro impactaron el Seat León en el que iba la pareja fallecida en dirección hacia A Pobra y un BMW Cabrio, a cuyos mandos iba una vecina de Ribeira de 45 años, María del Pilar F.P., que resultó herida muy grave y que circulaba dirección Ribeira.
La implicada en este fatal siniestro tuvo que declarar en el Juzgado de Ribeira, que decretó su puesta en libertad con cargos. El juez tomó entonces declaración a cuatro testigos aportados por la defensa y a la investigada, que pidió perdón por lo ocurrido, y para la que el abogado de la familia de las víctimas mortales solicitó prisión provisional al acusarla de dos delitos de homicidio, otro de conduccion temeraria y conduccion bajo efectos de alcohol y sustancias psicotrópicas.
