En la grada se jugó el otro derbi. A Lomba vivió el mejor ambiente de la temporada, con más de dos mil personas en las gradas, más de medio millar aficionados granates, que llenaron un fondo, dieron colorido y animaron mucho. Ya por la mañana los seguidores del Pontevedra se dejaron ver en las calles céntricas de Vilagarcía, sobre todo en los negocios de hostelería. Un programa especial en A Abadía do Duque entre Onda Arlequinada y Fondo Norte sirvió de aperitivo por la mañana. La afición local tampoco falló, como es habitual. La grada de preferencia, casi llena, fue la que más animó al Arosa. Desde el calentamiento ya.
El otro derbi entre las aficiones discurrió en un ambiente de cordialidad y deportividad. En el palco, el alcalde Alberto Varela presidió junto a Manolo Abalo y a la presidenta del Pontevedra Lupe Murillo. Tampoco se lo quiso perder el presidente de la Federación Gallega Rafael Louzán.
El resultado no dejó contentos a ninguna de las dos aficiones, aunque ambas despidieron con ovaciones a sus equipos. En el caso de la granate incluso se fotografiaron con el equipo al final. Aunque Arosa y Pontevedra pelean por objetivos muy diferentes, cuentan con un importante respaldo social, ya que se trata de equipos históricos de la provincia. Los granates se dejaron el liderato y los arlequinados no salen de descenso, pero ambos miran al último mes de liga con optimismo. Larga vida a los derbis.