Reto superado y promesa cumplida. El atleta arousano Pablo Otero corrió el domingo 70 kilómetros desde A Illa hasta el estadio de Balaídos en Vigo en un curioso desafío horas antes del debut liguero del Celta ante el Getafe. Pasadas las 9 horas salió desde la sede de la peña Carcamáns, de la que forma parte desde hace muchos años, para demostrar a sus amigos celtistas que es una persona de palabra. 

El pasado mes de diciembre, cuando el equipo de Claudio Giráldez estaba instalado en mitad de la tabla con un pequeño colchón de seguridad sobre la zona de descenso, el mediofondista le lanzó el reto a sus compañeros de la peña isleña del Celta. Si el equipo se clasificaba para Europa, iría corriendo a Vigo. Así ocurrió y el domingo le tocó cumplir con la promesa. Hizo el largo trayecto por etapas, siendo acompañado por corredores populares en alguno de los tramos. El primero entre A Illa y Mosteiro. El segundo hasta Pontevedra y el tercero con parada en Redondela. Ya en el último, llegada a Balaídos y ovación de los aficionados. Allí le esperaron también representantes del RC Celta, que le regalaron una camiseta con el dorsal 70, los kilómetros recorridos. Exactamente fueron 67 kilómetros y 880 metros en un tiempo de 5 horas y 32 minutos.

El inolvidable día para Pablo Otero no pudo tener el final deseado debido a la derrota del Celta en su estreno ante el Getafe por 0-2. Pero queda mucha liga, tiempo suficiente para retar a sus amigos a otros desafíos por el Celta, el equipo de sus amores que sigue habitualmente en vivo y en directo desde hace tiempo.