El equipo de gobierno de Ribadumia recibió en el Concello a todos los miembros del Club Xuventude Sisán tras proclamarse campeones el pasado domingo del grupo dos de Tercera Futgal, por lo que la próxima campaña serán equipo de Segunda Futgal, después de tres temporadas quedándose a las puertas de la subida de categoría. 

El club nació en 2021 con el objetivo de crear un espacio competitivo para los residentes, y desde entonces ha seguido creciendo, consolidándose como un equipo con ambición y compromiso. El camino hacia este logro no estuvo exento de dificultades. Hace apenas un año, el club se vio envuelto en un enfrentamiento institucional con el propio Concello de Ribadumia, reclamando derechos de uso de instalaciones municipales. Un conflicto que llegó incluso a la fase contenciosa, donde el Ayuntamiento argumentó que el Sisán era “un grupo de amigos obsesionados con usar las instalaciones”.

Un año después, las aguas parecen haber encontrado su cauce entre el equipo y los gobernantes, por lo que el presidente del club, David Pereira, no quiso perder la oportunidad de remarcarle al alcalde la importancia del apoyo institucional. “Agardamos que este título e este ascenso sirvan para que o Concello mude a súa opinión sobre o que representamos. Non somos unha peña de amigos: somos un club que compite, que gaña e que representa ao municipio con orgullo”, afirma. 

Además, la Federación Gallega hizo entrega del trofeo de campeones, por lo que el Sisán cierra así un año de lucha dentro y fuera del campo, con el fin de comenzar una nueva etapa llena de ilusiones y nuevos retos en una categoría superior.