Aguiño cerró ayer la XVIII Semana Cultural en honor del párroco Francisco Lorenzo Mariño, con un concierto infantil a cargo de Brais das Hortas, que supuso el colofón a la programación, diseñada específicamente, desde la asociación que lleva su nombre, para mantener vivo su legado y “seguir loitando pola cultura propia”.
El cura, natural de Porto do Son, fue el primer párroco de Aguiño, tras su segregación de Carreira. Asimismo, Lorenzo Mariño impulsó la construcción de la iglesia marinera, consagrada en su inauguración por el cardenal Fernando Quiroga Palacios.
Sin embargo, la figura del párroco transcendió por su defensa del gallego y por la cultura de Aguiño y de Galicia, un legado que ahora continúan fielmente desde la asociación.
Así lo evidenció el presidente fundador, y ahora directivo, de la Asociación Francisco Lorenzo Mariño, que realizó una ofrenda floral, “ó son da Marcha do Antigo Reino de Galicia e do Himno Galego”, en el cementerio de San Vicente de Noal, donde descansan sus restos.
La formación, surgida en 2005, realiza cada año este homenaje para que la figura del párroco, grabada ya en la historia de Aguiño, no quede olvidada.