Depositarios del legado de García-Martí están molestos por la retirada de su obra del Museo Valle-Inclán de A Pobra

La familia Bermejo-Rubio, depositaria desde hace dos décadas de gran parte del legado de Victoriano García Martí en el Museo Valle-Inclán de A Pobra, en virtud de la estrechísima relación de amistad de su tío abuelo con Ramón del Valle-Inclán, expresó su perplejidad, decepción y profundo malestar con la decisión del Ayuntamiento de destinar una sala de la colección permanente de dicho centro museístico a una muestra fotográfica ajena a los fines específicos de este y de sus fondos propios. Afirma que resulta obvio que tal decisión no sólo vulnera los usos a los que está destinado el museo, sino que también resulta ”incomprensible e injustificable” desde cualquier punto de vista, máxime habida cuenta de que, para una muestra proveniente de trabajos de alumnos de un instituto, ese Concello dispone de locales, como el propio centro educativo, la casa de cultura o la Casa Mariñeira. “Por desgracia, esto recuerda demasiado las prácticas caciquiles de otro tiempo”, afirmó el portavoz de la familia, Fernando Bermejo-Rubio.

También señala que, independientemente de las negativas consecuencias de la situación creada por “una decisión del todo desafortunada”, por los problemas de seguridad que pudiera acarrear, “lo que resulta grave e incontrovertible es que la decisión adoptada ha ignorado la ley y la normativa de gestión del patrimonio cultural, vulnerado el respeto debido a los depositarios de fondos y a las personalidades de aquellos a quienes está dedicado el espacio museístico, todo lo cual genera en nosotros una profunda desconfianza”. Y añade que si su familia decidió depositar los fondos de su tío abuelo en el Museo Valle-Inclán fue como resultado de los empeños y gestiones de profesionales y de las garantías que les ofrecieron, por lo que entendieron que sería el espacio idóneo para su salvaguarda y custodia, pero que la situación creada “nos suscita serias dudas al respecto”. 

Devolver la sala a su estado anterior

Fernando Bermejo Rubio le envía un mensaje al Ejecutivo local pobrense: “Dado el desprestigio que lo sucedido supone para el Museo y para ese Concello, que es su titular, así como el profundo malestar generado, esperamos de su buen juicio pongan fin de inmediato a esta arbitrariedad, instándoles encarecidamente a devolver la sala a su anterior estado y a velar de manera real y eficaz por el patrimonio cultural que les ha sido confiado”. Por otro lado, recordó que en los últimos años, su familia ha mantenido una relación cordial con el Concello de A Pobra, por ser la representación pública de la localidad de la que su pariente es hijo predilecto, y en la que le fueron dedicadas una céntrica plaza urbana, un busto honorífico y la biblioteca municipal. "Tanto es así que, cuando el pasado mes de enero, por iniciativa del Concello de Santiago de Compostela, se descubrió en esta ciudad una placa dedicada a nuestro tío abuelo, en mi intervención agradecí al Concello de A Pobra -aún no estando presente ningún representante de éste- la labor efectuada en pro del reconocimiento de su figura", concluyó.