La titular del Juzgado de Primera Instancia e Instrucción Número 3 de Ribeira decretó la puesta en libertad con una orden de alejamiento e incomunicación para un hombre de unos 40 años y que reside en la capital barbanzana, al que la Policía Nacional detuvo en la madrugada del pasado martes como supuesto autor de un delito de tentativa de homicidio de una viguesa de 44 años a la que, al parecer, había conocido por Internet. Pese a la gravedad de la acusación, tanto la Fiscalía como la abogada de la víctima no solicitaron el ingreso en prisión, pero si pidieron, por precaución, una orden de protección para la mujer, mientras que el letrado de oficio que se designó para atender al arrestado pidió su puesta en libertad, pero que se fijase una orden de protección para ambos.  

El detenido llegó al edificio de los juzgados ribeirenses en torno a la una menos veinticinco del mediodía procedente de los calabozos de la comisaría y custodiado por una patrulla del Cuerpo Nacional de Policía. Poco más de hora y media después comenzó la toma de declaraciones tanto de él como de su víctima, que se denunciaron mutuamente por las lesiones que supuestamente se causaron mutuamente, algunos de los cuales eran visibles al entrar y salir de la sede judicial. Tras lo ocurrido, ella tenía un chichón, un ojo morado y sangraba por la nariz y el presentaba alguna erosión en la cara, marcas de mordeduras y una lesión en una pierna. Sobre el contenido de las declaraciones de ambos, se sabe que resultaron contradictorias, pues no resultaron coincidentes en los aspectos más destacados del caso. Ella sostuvo que eran novios, pero él lo negó, precisando que tenía relación de pareja con otra persona, con la que estaba en una vivienda en la madrugada en la que fue arrestado por agentes de la comisaría, pero no negó que conocía a la mujer de Vigo.

Sobre lo ocurrido en la noche del lunes y que derivó en que esa viguesa enviase a su madre su ubicación por WhatsApp y le indicó que avisase a la Policía, además de que se refugió en un local del centro de la ciudad, ella sostuvo que él era muy celoso y no quería que ella mirase a los demás y que de ahí surgió el enfrentamiento, mientras que él declaró que ella le había pedido que le comprase ciertas sustancias y que ante su negativa se pudo agresiva. Para tratar de poner luz sobre lo sucedido, está previsto que se le tome declaración a la madre de la mujer de Vigo, así como a una novia del detenido y a un testigo que pudo presenciar lo ocurrido.