El conocido fotógrafo portonovés, Carlos Carballa, más conocido como “Carramón”, recibió esta tarde la Cámara de Oro por su aportación a la historia de la fotografía del municipio. El acto se enmarca dentro de la exposición Ollares da Rúa, que expone hasta mañana imágenes antiguas del municipio en el parque de O Espiñeiro de Portonovo y el próximo 11 y 12 de junio, en la Praza de Pascual Veiga. En total son más de 2.500 imágenes del municipio que van desde los años 50 hasta la actualidad. Además, hay una aérea del año pasado de Portonovo de cinco metros de largo y 3 de ancho a modo de photocall.

La concejala de Cultura, Elena Torres, fue la encargada de hacerle entrega de la insignia a Carlos Carballa que contó sus inicios en el mundo de la fotografía. “Pode sonar raro, pero empecei a interesarme pola fotografía cando saía da Escola Naval de Marín no maleteiro dun coche durante a miña etapa na mili”, recordó. Ese pequeño agujero del maletero y el reflejo de todos los edificios en su gorra a modo de “caixa negra” provocó en el “unha fascinación”. Fue en ese momento en el que empezó a realizar de forma autodidacta fotos con una cámara compacta, Werlisa, a sus compañeros. “Vendíalles cada foto a 25 pesetas”, señaló.

Cuando acabó el servicio militar, fundó en Portonovo el primer estudio de fotografía, Studio 21, en 1981, y puede presumir de contar todavía con más de 15.000 negativos de fotos históricas de Sanxenxo: “Teño fotos da primeira nevada en Portonovo, das cisternas da auga cando houbo sequía, de estradas en terra…”, aseguró. Un amplio archivo de fotografías que se expondrán en próximas ediciones.