La exigencia de planos dilata los trámites para intentar regularizar la Valle-Inclán

Los trabajadores y la propia Residencia Valle-Inclán de la tercera edad en Vilanova de Arousa se han puesto manos a la obra para intentar reunir toda la documentación exigida por la Xunta para una eventual regularización del centro que permita evitar su cierre y continuar prestando servicio. 
Según explicaban ayer, todavía no fue posible remitir el papeleo a la Consellería de Política Social, ya que se han encontrado con una dificultad añadida que hará que la preparación de los documentos se prolongue algo más de lo inicialmente pensado. Han reunido ya buena parte de los requisitos escritos, pero la dificultad radica en la necesidad que impone la Xunta de remitir planos del propio edificio residencial. 
El recinto, explicaban ayer representantes de los trabajadores, data de los años cincuenta y ha tenido diferentes usos, con lo que recuperar ahora los planos requeridos puede llevar más tiempo. A ello habría que añadir que la administración, al parecer, también demanda estos planos en formato electrónico, algo de lo que, dada la antigüedad del inmueble, no se dispondría. Aún así, se han puesto a trabajar para conseguirlos, indicando que la Consellería, en su propuesta de acuerdo de la semana pasada, tampoco puso sobre la mesa un plazo concreto o cerrado para aportar la documentación que permita regularizar la situación. 
Entre tanto, la residencia sigue recibiendo inspecciones periódicas, cada pocos días, de la administración autonómica.