Los duros incendios que asolan la provincia de Lugo durante estos días obligan a trasladar personal de todos los parques de Galicia y, en el caso de O Salnés, provocaron el cierre del de Ribadumia, al no contar con efectivos a mayores para mantenerlo abierto. El de Vilagarcía sí logró cubrirse y estar operativo, pero tuvo que asumir las incidencias en toda la comarca de O Salnés, al estar cerrado el de Ribadumia, sin un plan alternativo.
En cualquier caso, fue una situación que se dio durante una jornada y, hoy, ya volvió a estar abierto el parque. La plantilla, en todo caso, confía en que no se vuelva a repetir esta situación y que se opte por otras fórmulas, para evitar que quede desprotegida ninguna zona. Una dotación de Bomberos de Vilagarcía y Porriño se desplazó hoy a Lugo, mientras que efectivos de Boiro y Ribeira que no están de guardia llevan varios días acudiendo como voluntarios a colaborar con las labores de extinción de incendios forestales en Ourense.
El lunes estuvieron dos efectivos de Boiro y hoy fueron otros compañeros de su mismo parque a relevarlos en las zonas de Rubiá y O Barco de Valdeorras. Durante la tarde, partieron desde Boiro dos bomberos de Ribeira para relevarlos a partir de las diez y media de la noche. La misma situación se producirá durante estas jornadas, o al menos estas son las previsiones, mientras no se alivie el riesgo en las provincias de Lugo y Ourense.