Meis se inundó ayer de una legión de niños y adultos dispuestos a sumar para ayudar al pequeño Leo Diz, que espera en Barcelona por un trasplante de pulmón después de que una enfermedad ultrarrara le impida respirar. Fue en el marco del Festival Solifesti del CPI Mosteiro, que este año se ha dedicado a recaudar fondos para que sus padres puedan costear la estancia y manutención mientras está ingresado y que el Sergas no cubre. La venta de camisetas, pulseras y la barra que acompañaron a los conciertos se les entregará, y lo que no necesiten se destinará a otros niños que lo precisen. Fue una jornada familiar con conciertos de media docena de artistas, talleres y sobre todo con un deseo común: que aparezca pronto un donante compatible con el bebé meisino.