La Denominación de Orixe Rías Baixas prevé una cosecha histórica, que alcanzaría los 50 millones de kilos de uva. Así lo anunció ayer el presidente del Consello Regulador, Isidoro Serantes, durante el acto inaugural de la Festa do Albariño, el hito promocional más importante de la DO. Unas cifras que la convertirían en la más abundante, pero además se espera una “moi boa calidade”.
El Pleno ya ha evaluado los resultados del informe de estimación de cosecha elaborado por los técnicos del Consello Regulador, que son muy optimistas con respecto a la vendimia de este año, que prevé sobre 50 millones de kilos de uva, aunque Serantes señaló que hay un margen de error “dun 5%”, ya que dependerá de las condiciones meteorológicas, ya que podrían reducirse las estimaciones de producirse una sequía prolongada durante el mes de agosto, por lo que situó la previsión “entre 48 e 50 millóns”.
Así, aunque se mostró un poco escéptico a valorar las previsiones de cantidad de la vendimia —ya que, como se señaló anteriormente, dependerá en buena medida de las condiciones meteorológicas y la maduración de los racimos, por lo que no se sabrá con más exactitud hasta “os últimos días de agosto”— sí subrayó que las estimaciones en cuanto a la calidad son “espectaculares”, por lo que se espera una cosecha “moi boa”. En cualquier caso, el ciclo vitícola no está finalizado y será necesario ver qué sucede en el próximo y cómo maduran los racimos, aunque la previsión es que los trabajos de recolección se puedan iniciar a principios de septiembre.
Así pues, de alcanzarse la cifra de los 50 millones de kilos, la Denominación de Orixe batiría su récord histórico, situado actualmente en la vendimia de 2023, cuando se superaron los 44,3 millones de kilos de uva. Supondría también un importante incremento con respecto al pasado ejercicio, cuando se recogieron 42.140.930 kilos.
Queda pendiente ahora la convocatoria de un nuevo Pleno en las próximas semanas, en el que se tratará la solicitud de Unións Agrarias, que propone incrementar los límites de producción hasta un máximo del 25%, al igual que se realizó en el año 2011. Según señalaron desde la organización, muchos viticultores han detectado “moitos casos de fincas con elevadas producións, que superan o límite establecido de rendemento por hectárea e que sen embargo presentan parámetros de calidade óptimos”. Así, entienden que, de confirmarse estas previsiones, muchos superarían el rendimiento fijado en 12.000 kilos por hectárea para la variedad del albariño. El objetivo de la DO es convocar la sesión la próxima semana.