Somos denuncia que el Estado retiene 186.000 euros a Ribadumia por no remitir el Orzamento de 2023

Somos Ribadumia denunció ayer que el Ministerio de Hacienda lleva desde noviembre reteniéndole fondos del Estado al Concello por un retraso en la presentación del Orzamento municipal de 2023. Señaló que la cifra ya alcanza los 186.000 euros y califica de “inadmisible” la demora porque se trata del presupuesto prorrogado de 2022. De hecho, no duda en acusar al gobierno local de “desidia” por “non mandar un papel para comunicar o estado de prórroga”.

El grupo del concejal Sergio Soutelo explicó que estas aportaciones estatales “son adiantos dos fondos anuais” que le corresponden al municipio y “entran cada mes de maneira líquida e libres” para cuestiones que van desde “pagar nóminas ata facturas de empresas”. Así las cosas, considera que esa retención de casi 200.000 euros “complica moito a xestión directa e do día a día” y “pode provocar retrasos nos pagos de todo tipo”, advirtió. También alertó de que “podería ser peor”, pues tras consultar la base de datos del Ministerio, ha comprobado que este lleva un “retraso” en la aplicación de la ley, en concreto del artículo 36 de la Ley 2/2011 de 4 de marzo de economía sostenible y de la DA 87ª de la Ley 22/20221 sobre el cumplimiento “obrigado” de remitir los presupuestos municipales a la administración central. Pues “no caso de non presentarse” antes del 1 de julio del mismo año, “aplicaranse retencións” desde septiembre, con lo cual serían dos meses más y “estarimos falando de preto de 400.000 euros”, añadió el opositor en su comunicado. 

También señaló que, a falta de publicarse los datos del último trimestre de 2023, el Periodo Medio de Pago (PMP) estaba “xa en 50 días”, lo cual “supón un prexuízo moi grande” para las empresas y autónomos proveedoras del Concello, indicó. 

Así las cosas, considera que hay un “abandono do control do funcionamento económico” del Ayuntamiento, al que suma un “retraso” con la aprobación del resultado contable de 2022 que “pode traer consecuencias legais e problemas para acceder a fondos e axudas”, mientras que “David Castro conta cunha liberación de 1.500 euros e a concelleira de Contas cunha de 1.900 e, ata o momento, o único que se sabe da súa xestión é que sae nas fotos”, criticó. 

Desde Somos Ribadumia aseguran estar “moi preocupados pola deriva” y esta gestión, que tildan de “lamentable e perigosa”, además de preguntarse cómo Castro, que ahora es presidente comarcal, “pretende xestionar unha mancomunidade de nove concellos”.