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martes | 23 abril | 2024
El malestar en Cambados es mayúsculo después de que en la madrugada de ayer se produjera un nuevo ataque a coches aparcados, y ya van tres, por lo menos. En esta ocasión hubo un cambio de “modus operandi”, pues se produjo en día laborable y en lugar de rajar ruedas, esparcieron un líquido corrosivo sobre los capós, degradando la pintura, así que podría ser un decapante.
La cifra provisional de afectados es de cuatro, nuevamente, en la calle Os Olmos y uno en Ribeira de Fefiñáns. El Concello defiende que adoptó medidas, pero también reconoce que “non foron suficientes” y ahora espera que las cámaras instaladas en febrero, ante la sucesión de sabotajes, permitan identificar al autor.
El alcalde, Samuel Lago, explicó que vinculan a la misma persona todos los episodios ocurridos en los últimos meses, sobre todo en la zona de Os Olmos, donde el ataque a coches llegó al culmen en febrero, con una treintena de afectados, y también se registraron varios casos de lanzamiento de excrementos al portal de un edificio. Curiosamente, como relató el propio regidor, el día anterior al sabotaje, el lunes, él, el concejal de Seguridade Cidadá, Tino Cordal, y el jefe de la Policía Local mantuvieron una reunión con su comunidad de propietarios para dar cuenta de las medidas adoptadas.
Cordal detalló que la Guardia Civil intensificó sus patrullas en las noches del fin de semana, pero a la vista de que es la primera vez que se produce entre semana, “teremos que pedir un reforzo da vixilancia e imos poñer todos os nosos esforzos e ferramentas que temos á nosa disposición para tratar de identificar a este vándalo –que non sabemos que motivos escuros pode ter para facer este dano– e poñelo á disposición da xustiza”. “Faremos todo o que estea nas nosas mans”, añadió Lago, quien reconoció que, a la vista de que ha vuelto a ocurrir, las medidas adoptadas “non foron suficientes”. De hecho, no descartan instalar más cámaras de videovigilancia como las dos colocadas en febrero en la calle, tras conseguir un permiso provisional de la Subdelegación.
El edil de Seguridade esperaba ayer que la revisión de las imágenes de estos dispositivos aportasen nuevas pistas que “permitan avanzar na investigación”, pues defendió que tanto la Policía Local como el Instituto Armado, que instruye la causa tras la recepción de las diferentes denuncias, han trabajado en el caso a lo largo de estos meses.
El propósito es tener una identificación completa, pues en anteriores ataques, las autoridades obtuvieron grabaciones de un sospechoso gracias a dispositivos de establecimientos y a que realizó todo un peregrinaje por el centro urbano rajando ruedas. Se trataba de un hombre de complexión delgada que se cubre la cabeza con la capucha de una sudadera. También espera que se diluciden otras cuestiones, pues “sospeito que ten que ter algún cómplice”.
Cordal y el alcalde también condenaron “de maneira contundente” estos hechos, que “causan danos aos bens das persoas, xeran moito malestar e provocan un clima de inseguridade que temos que atallar canto antes”, especificó Lago. También se solidarizaron con los afectados.
