El Concello de Catoira recurrirá a un préstamo para pagar las facturas pendientes con las empresas de la zona. El objetivo del gobierno que preside el nacionalistas Xoán Castaño es el de “eliminar de raíz” su deuda total con proveedores en dos meses.
El ejecutivo señala que está “a traballar a fondo” para sanear la situación económica municipal. Para ello, va a aprovechar “de maneira voluntaria”, una propuesta del Ministerio de Hacienda para “eliminar de raíz” su deuda con proveedores.
 

De esta manera, la deuda con las empresas se transformaría en una deuda bancaria, para  lo que se solicitará un préstamo con el Fondo de Financiación de Entidades Locales. De conseguir el visto bueno, los proveedores, señala el nacionalistas, podrían cobrar las facturas en julio. La administración local, por su parte, “terá condicións vantaxosas para amortizar o novo préstamo nun prazo máis flexible”. El resutlado será “un borrón e conta nova” para el Concello, según Castaño, para poder pagar al día lo que vaya entrando.
 

El Ministerio acaba de habilitar un mecanismo para que los concellos financien la cancelación de sus obligaciones pendientes con proveedores. Tiene dos régimenes: El primero, de carácter obligatorio para los casos de gran morosidad y demora reiterada; el segundo, para los que a pesar del retraso en los pagos están en una situación máis desahogada y, de forma voluntaria, quieran sanear sus cuentas. En este último supuesto estaría Catoira, apunta Castaño, que incide en que el Concello tiene decidido presentar su solicitud al Ministerio, informando de forma exhaustiva del plan de ajuste que tiene en vigor el municipio desde 2023 y de las medidas de ahorro que ya fueron aplicadas por “responsabilidade” y para contener el gasto.
 

El documento incluirá, por tanto, medidas como el aumento del IBI, del impuesto sobre la tracción mecánica, el cobro de servicios como el Plan Madruga o de Envellecemento Activo o la eliminación de plazas para realizar la contabilidad o atender el aula Cemit, servicios que ahora se prestan con personal municipal. Otro requerimiento será cumplir, en el futuro, con los plazos máximos de pago, garantizar el objetivo de estabilidad presupuestaria y mejorar el ahorro y remanente de tesorería. 
 

“Catoira acumula facturas atrasadas sen pagar que non ten sentido seguir arrastrando”, dice Xoán Castaño, que incide en que “pouco a pouco” se hace frente a los pagos mediante reconocimientos extrajudiciales de crédito, lo cual ahora se agilizará.