11º-26º
viernes | 19 abril | 2024
El Auditorio de Catoira se convirtió hoy en un espacio en el que se habló de lucha, de dignidad, de víctimas y de lo mucho que todavía queda por hacer cuando se habla de memoria histórica. Las Xornadas sobre Memoria Democrática organizadas por la Iniciativa Cidadá pola Memoria acercaron hasta el municipio vikingo a expertos que ofrecieron su punto de vista sobre una cuestión que sigue siendo actualidad. Además de historiadores y estudiosos en los diferentes ámbitos relacionados con la memoria las jornadas contaron con dos invitados de lujo: el jurista-asesor del Tribunal Penal Internacional, Baltasar Garzón, y la exministra de Justicia, Dolores Delgado. Ambos reivindicaron el cumplimiento de la nueva Ley de Memoria Democrática para “reconstruir el relato” y para “intentar alcanzar la justicia en todos los ámbitos”. Así se expresaba Delgado, que añadió que “esta memoria tiene que ser la de los nietos y los bisnietos y esta ley tiene de bueno que pone el foco también en la educación”. La exministra reconoció que para su aplicación serán necesarios fondos y destacó que está mucho más desarrollada que la anterior, del año 2007.
En este sentido –y consciente de que todavía hay partidos que amenazan con derogar la ley si llegan al gobierno y que hay todavía vestigios del Franquismo en calles y zonas públicas– Baltasar Garzón fue contundente e incidió en que “la ley está para cumplirla y esta hace que ea el Estado el que inste a su cumplimiento”. Ambos destacaron que la legislación actual coloca a las víctimas en el centro de la misma y que obliga al Estado a ser pro-activo en la recuperación de la memoria. Una legislación que –a juicio de ambos– marcará un antes y un después en el tratamiento de las víctimas y también en el relato que en el presente y también en el futuro se cuente a generaciones venideras sobre lo que es una de las etapas más oscuras de la historia de España.
