Vilagarcía despidió ayer lo que, para el alcalde Alberto Varela, está considerada “a romaría urbana máis importante de Galicia”, las fiestas de Santa Rita.
El concierto de la Banda de Música Municipal, celebrado ayer en la Rúa García Caamaño, se convirtió en uno
de los platos fuertes de una jornada de clausura que cerraba, un año más, la celebración en honor a la
patrona de la ciudad. Un centenar de personas se reunió a las 13:00 horas para disfrutar de este espectacular concierto, ocupando todos los asientos disponibles. Algunos, incluso, optaron por disfrutar del evento de pie, ante el éxito de asistencia.
El tiempo también acompañó en el cierre de estas fiestas, y en general durante toda la edición, lo que incrementó aún más el atractivo para que los vecinos salieran a las calles y participaran en las diferentes actividades disponibles.
La próxima cita del municipio será este fin de semana, con una nueva edición del Festivala.