6º-17º
domingo | 28 abril | 2024
El alcalde de Vilagarcía, Alberto Varela, y el presidente de la Diputación de Pontevedra, Luis López, firmaron un convenio de colaboración para la ampliación de las piscinas de Fontecarmoa. El ente provincial aportará un millón de euros, de los 3,1 que cuesta esta fase del proyecto. El acuerdo se enmarca en el Programa Provincial de Infraestruturas e Dotacións Singulares para a Execución da Axenda 2030.
La ampliación de la piscina de Fontecarmoa es un proyecto presupuestado en 3,7 millones que se realizará en dos lotes. El primero, ya en marcha, con un presupuesto de medio millón de euros que se financia con fondos europeos, consiste en la remodelación y reordenación de los vestuarios de las actuales instalaciones y en el arreglo de la galería de la fachada sur.
El segundo lote, al que se destinará la subvención provincial, tiene un coste total de 3,1 millones de euros y abordará la construcción del nuevo edificio que albergará el segundo vaso, el pasillo que conectará ambas zonas y el acondicionamiento y urbanización del entorno de las instalaciones. Esta fase del proyecto se licitará en cuanto el gobierno local concrete el resto de la financiación necesaria para ejecutar la obra, bien concurriendo a subvenciones de otras administraciones o con fondos propios.
La actuación, que fue diseñada por el arquitecto madrileño Jesús San Vicente y que contempla un segundo vaso de 25 metros de longitud, dotará a Fontecarmoa de las condiciones y equipamientos precisos para homologarla de cara a la celebración de competiciones oficiales, con marcadores electrónicos y gradas con capacidad para 300 personas. Desde el Concello destacan que la operatividad, el confort, la racionalización de espacios, la optimización de recursos y la eficiencia energética son los criterios seguidos para la elaboración de este proyecto.
La nueva piscina tendrá seis calles y se situará en un inmueble con cubierta inclinada y a una agua. En el interior, se habilitará una grada con espacios diáfanos y funcionales. En el exterior se crearán nuevas plazas de aparcamiento, se mejorará la accesibilidad con la supresión de barreras arquitectónicas, se dotará de uniformidad estética dando continuidad a los pavimentos y se plantarán árboles de gran porte para dar sombra al nuevo edificio.
Según recoge el convenio, las obras deben estar finalizadas antes del 30 de abril de 2025. Este protocolo entre Diputación y Concello es compatible con subvenciones de otras administraciones sin que el montante concedido a la administración local por el gobierno provincial se vea reducido.
