Que la Danza de Espadas – o Farsa de Carril– es una manifestación cultural digna de ver al menos una vez en la vida es algo que no solo los vilagarcianos, sino todos aquellos que la han disfrutado tienen claro. De ahí que hayan surgido voces que pidan que se inicien los trámites para que pueda ser declarada de Interese Turístico Autonómico, una nominación que tienen otras celebraciones en Arousa como puede ser la Festa do Carneiro ao Espeto, de Moraña. Sin embargo no va a ser tan fácil, o al menos así lo ha manifestado el concejal de Turismo de Vilagarcía, Álvaro Carou, en una de las últimas sesiones plenarias en respuesta a preguntas del Partido Popular. Fue el socialista el que señaló que entre uno de los requisitos a tener en cuenta para poder optar a esa declaración es que debe ser una fiesta y no una manifestación cultural, como es el caso de la Farsa.
Cabe recordar que la Danza se interpreta cada año coincidiendo con la celebración de las fiestas del Santiago Apóstol (patrón de Carril) y como eje principal de esta efeméride. Muy raramente –como ocurrió en el Centenario de la unión de Carril, Vilagarcía y Vilaxoán– se interpretó fuera de esas fechas tan señaladas.
Inicialmente solo la bailaban hombres, pero ahora también lo hacen mujeres. Un orgullo para todo el pueblo de Carril que ese día –el 25 de julio– se lanza a la calle para ver un espectáculo muy vistoso y que respira tradición. Que pueda –o no–ser declarada de Interese Turístico Galego es otro cantar, pero al menos ya es uno de los referentes turísticos que hay en Vilagarcía por excelencia.