Fue el creador de una de las obras más conocidas de Vilagarcía, pero su nombre continúa siendo uno de los más olvidados de la historia local. José Fontenla Búa se exilió a Argentina en cuanto los franquistas plantaron sus armas contra el dictado de las urnas. Allí estableció un hogar donde la patria estuvo siempre presente..
Así lo demuestra su hija, Angélica Fontenla, experta en la cultura gallega que, desde el otro lado del Atlántico, se empapó de la obra de autores como el vilagarciano Fermín Bouza Brey.
Memoria viva de la Vilagarcía republicana, todavía recuerda con gran cariño al médico Moreira Casal, al que en su casa llamaban “tío José”. La familia Fontenla se vengó del fascismo desarrollando en Argentina todo el arte repatriado. Ester Fontenla, hija del cantero, cuenta con una prestigiosa voz. El talento del baile le correspondió a Norma Fontenla, primaballerina de ballet, muy conocida, que falleció de forma temprana en un accidente de tráfico en 1971. Era sobrina de Ramón Fontenla Búa.
Toda una saga sobre la que quedan muchas páginas que escribir y que ha desembarcado en Vilagarcía con el objetivo de rendir homenaje a sus orígenes. A Galicia volaron Angélica y Ester Fontenla, a sus 93 y 87 años de edad, su sobrino Raúl y varios familiares más. Mañana estarán en el acto que se organizará en la sede de O Faiado da Memoria, situada en Ravella, para colocar una placa en recuerdo de Ramón Fontenla. Será a las doce del mediodía. Además, el viernes 26 se desplazarán al Cavadelo, en un acto en el que estará presente el gobierno local.