Técnicos Especialistas en Desactivación de Artefactos Explosivos (Tedax) de la Guardia Civil realizaron ayer un exhaustivo registro en la nave de Excavaciones Expano SA, en la zona industrial de Vilanoviña, Meis, alertados por una llamada que informaba de la supuesta colocación de una bomba en la empresa y que resultó ser, al parecer, una falsa alarma.

Según ha trascendido, el comunicado se hizo por teléfono al servicio de emergencias del 112 Galicia, ocho minutos después de las seis y media de la mañana de este lunes.

La Guardia Civil investiga una llamada al 112 que dio la falsa alarma

De inmediato se puso en marcha un operativo de emergencia que derivó en la zona en un importante despliegue de fuerzas de seguridad, entre ellas, los servicios de desactivación de explosivos. El dispositivo de búsqueda y las consiguientes medidas de seguridad impidieron el normal desarrollo de la actividad en la nave durante unas horas, por lo que sus trabajadores no pudieron acceder a sus puestos, tal y como confirmaron desde la empresa.

Después de un rastreo a fondo, los especialistas concluyeron la inexistencia de artefacto explosivo alguno, por lo que levantaron los cordones de seguridad. La empresa retomó la actividad hacia las diez de la mañana, según fuentes de la propia firma.

La empresa detuvo la actividad durante unas horas en medio de un fuerte despliegue

Tanto estas como portavoces del Instituto Armado indicaron desconocer el origen de la llamada que generó la falsa alarma, aunque la Guardia Civil abrió ayer mismo una investigación para intentar rastrear y localizar al responsable de la comunicación y de sus motivaciones.

El considerable despliegue policial y la presencia de numerosas personas en las inmediaciones de la nave provocaron ayer gran sorpresa a los conductores que, a primera hora, circulaban por la carretera general Pontevedra-Vilagarcía (PO-531), en las proximidades de la zona donde se desarrolló el operativo de búsqueda.