El Gobierno local de Caldas de Reis encargó la realización de un estudio sobre la mejora de la accesibilidad en el Consistorio que incluye la instalación de un ascensor con capacidad para ocho personas y adaptado para discapacitados.
Este es uno de los aspectos a corregir que se incluyen en la memoria, que especifica que debería ser eléctrico, de bajo consumo y sin sala de máquinas, entre la planta baja y el primer piso. Su instalación conllevaría una obra de albañilería, incluso con cimentación de foso y la idea es que fuese de cristal transparente. Otra de las mejoras que se proponen para el Consistorio es la sustitución de la caldera de gasoil para la calefacción del edificio, puesto que la actual es insuficiente para ofrecer el confort necesario. En el informe se incluye la realización de otras obras menores como sería el caso de la reparación de las roturas del falso techo de escayola de la planta baja y colocación de estores en el salón de plenos.