Vilagarcía podría disponer de un crematorio en un plazo mínimo de un año. Pompas Fúnebres de Arosa proyecta poner en marcha este servicio en las instalaciones del Tanatorio de Rubiáns, donde hay espacio suficiente para acoger este horno.
Una oportunidad de oro para la capital arousana que sería el primer municipio en la comarca en disponer de un servicio de estas características. Hasta ahora, los vilagarcianos que optan por incinerar a sus seres queridos tenían que trasladarse a Vigo, mientras que de salir adelante este proyecto podrán hacerlo en el propio Tanatorio de Rubiáns.
En cualquier caso, se trata de un proyecto que, según explicó Eduardo Martínez a Radio Arosa, está todavía pendiente de varios trámites que pueden aplazar su ejecución más de lo deseado.
Son cuestiones de índole administrativa ya que hacen falta una serie de permisos y por el momento tan solo se han solicitado. Los cálculos de la familia es que antes de doce meses no será posible iniciar la obra que, eso sí, Eduardo Martín indicó que “no llevará mucho tiempo”.
Y es que la ventaja clara con la que cuenta esta empresa para poner en marcha este proyecto es que tiene las instalaciones adecuadas para tal fin y que lleva muchos años gestionando servicios funerarios. Experiencia e infraestructuras avalan a la familia Martínez para poner en marcha una iniciativa sobre cuya necesidad insistió el otro día el presidente de la Mancomunidade do Salnés durante un Pleno. “Haría falta un crematorio en la comarca porque ahora hay que ir a Vigo”, dijo Gonzalo Durán, que añadió que el tiempo del desplazamiento, unido al que lleva el proceso en sí, hace más doloroso, si cabe, el momento para las familias. La importancia del proyecto hace bastante probable que las autoridades locales también lo apoyen. n