Cuatro comenzará el próximo día 10 de julio la grabación de un nuevo reality, “Adán y Eva”, un novedoso programa de citas en el que las parejas se muestran al desnudo y que en países como Holanda ha cosechado un éxito de audiencia sin precedentes.
Hombres y mujeres convivirán en una isla tropical en busca del amor verdadero partiendo de un primer encuentro en el que puede haber de todo, menos ropa.
Y a formar parte de esta aventura opta Manuel Vidal Taboada. Su vídeo promocional puede verse, y votarse, en youtube. “Cuantos más votos tenga más posibilidades tengo de que me seleccionen”, explica.
Y es que Manuel Vidal tiene muy claro que quiere ser uno de los concursantes de la primera edición de “Adán y Eva” en España. Persigue dos cosas: Encontrar a la mujer de su vida y hacerse famoso. “Una cosa lleva a la otra. Al participar en un programa de estas características acabas siendo una cara conocida”.
Manuel Vidal trabajó de carpintero y de marinero, pero a sus 48 años de edad cree que encontrar a la mujer de su vida es una prioridad y esta oportunidad televisiva le parece ideal “y hasta romántica”. Para él “convivir 24 horas con una mujer facilita mucho el conocerla a fondo, sin llamarnos a engaños”.
En el vídeo, un grupo de amigos le definen como un “romántico empedernido” que tratará de seducir a la mujer de su vida ofreciéndole protección, cuidados y seguridad.
El senderismo, la natación y los paseos por espacios abiertos son los principales hobbys de este portonovés que, de ser seleccionado, pondrá todo de sí para encontrar a su media naranja, que tendrá que ser “con curvas, de mediana estatura, valiente e inteligente”.
 El formato del programa, en el que los participantes deben despojarse de todo para mostrarse tal y como son y en una isla paradisíaca con los enseres básicos para sobrevivir, atrae especialmente a este portonovés con espirítu aventurero. Y una pequeña muestra de lo que está dispuesto a hacer, para sobrevivir, en una isla está en el vídeo promocional, en el que eligió el cañaveral de Canelas para demostrar su capacidad para construir una cabaña.
En su potencial, “masculino y de seducción”, creen con firmeza sus amigos, que además están convencidos de que es el concursante idóneo para “Adán y Eva”.
Desnudos por dentro y por fuera, sin nada que esconder ni con lo que esconderse. Así define Cuatro su nueva apuesta televisiva.
Caminando desde extremos opuestos a la playa, los concursantes mantendrán un primer encuentro. A partir de ese momento arrancará una experiencia a la que se irán sumando otros candidatos que ampliarán las opciones de los protagonistas para encontrar pareja.
Cada una se conocerá desnuda y sus citas terminarán con ropa. Cada programa será concluyente y terminará con la decisión de la pareja.