Sara Gómez Ferreirós: “Una ciudad como Vilagarcía necesita un pabellón decente”

Sara Gómez Ferreirós: “Una ciudad como Vilagarcía necesita un pabellón decente”
Sara Gómez suma 16 temporadas y más de 400 partidos como profesional | gonzalo salgado

Sara Gómez Ferreirós (Vilagarcía, 34 años) suma 16 temporadas como profesional. Once de ellas en el Cortegada. Tras un año alejada de las pistas debido a su maternidad, la capitana ha regresado en un año atípico, marcado por la pandemia, por las dificultades que sigue arrastrando el equipo para sumar triunfos en Liga Femenina 2, por el cambio de inquilino en el banquillo y por noticias difíciles de digerir como la muerte de Helena Mariño. 

Sara Gómez, la jugadora de más de 400 partidos en competiciones FEB, charla de todo esto coincidiendo con el regreso del equipo a los entrenamientos y con el anuncio del alcalde del compromiso de la Xunta para invertir en el arreglo de Fontecarmoa.

Después de un año en blanco, ¿qué valoración hace de su vuelta a las canchas?
Al final con la pandemia no me perdí tantos partidos el año pasado. En estos últimos partidos he empezado a sentirme mejor, ya que al principio noté que me faltaba ritmo y el cuerpo se resentía. Sobre todo las rodillas y los tobillos. En los primeros partidos me costó un poquito, pero ahora ya me voy encontrando mucho mejor.

Su rendimiento siempre fue bastante alto y sus números esta temporada de momento están por debajo de temporadas anteriores. ¿Está esto relacionado con el largo período de inactividad?
Sí, claro. Se nota mucho un año parada. Por mucho que hagas cosas, no haces entrenamientos con impacto. Yo esta temporada tuve sensaciones que nunca había tenido en mi cuerpo, sobre todo en las articulaciones. Sentía que las rodillas y los tobillos me iban a reventar. Por eso me costó mucho al principio. Me faltaba chispa, la mente quería pero el cuerpo no me iba. En los últimos partidos sí me empecé a sentir ya como siempre.

Como jugadora de mentalidad ganadora, ¿cómo lleva que el equipo esté inmerso en dinámicas negativas de resultados los últimos tiempos?
A mí no me gusta nada perder, para nada. Es una situación fea. Pero todos debemos ser conscientes de que el equipo es el que es. Al final no hay presupuesto, no hay dinero, no hay ayudas...Y vemos que todos los rivales se refuerzan, que incorporan jugadoras de fuera muy buenas y nuestro equipo en cambio es más justo. De todas formas creo que debimos haber ganado al menos tres o cuatro partidos más. Sé que en la segunda vuelta los vamos a ganar, va a ser diferente porque siempre ocurre, hay más trabajo y se nota. La valoración de la primera vuelta no es buena, es una situación fea y hemos perdido partidos que debimos haber ganado. Y ya no es haber perdido, es haberlo hecho de esa forma, dando malas sensaciones. Eso es lo que no puede ser. Se puede perder porque esta es una liga en la que excepto dos o tres equipos, puedes ganar o perder contra cualquiera, pero no dando la imagen que dimos en algunos partidos.

Se rompió la cuerda por el entrenador. Sorprendentemente, porque Rubén Domínguez llevaba 8 temporadas en el equipo. ¿Quizá su discurso estaba agotado y ya no llegaba a las jugadoras? 
Llevaba muchos años pero el equipo confiaba mucho en él. Rubén confiaba mucho en nosotras y nosotras en él. Pero al final es como todo, cuando las cosas van mal entiendo que la directiva se desesperase y quisiese hacer un cambio para ver si había una reacción. También es cierto que las jugadoras somos así, cuando hay un cambio parece que tenemos más chispa.

A veces los cambios son positivos...
Esperemos que por lo menos sirva para que el equipo empiece a ganar.

¿Qué tal con Javi Nogueira?
Bien, muy bien. Yo no lo conocía y se le ve con muchas ganas de trabajar y meternos esas ganas a nosotras.

Casi todos los equipos tienen extranjeras que marcan diferencias. El club “cortó” ahora a Saric. Parece que será difícil que llegue algún refuerzo importante, ¿no?
Seguro que a la directiva y al entrenador le gustaría traer a una pedazo de jugadora, pero al final tienes que adaptarte a tu limitación económica. El club busca y busca, pero tiene que adaptarse al presupuesto.

Lleva más de 400 partidos en competiciones FEB, ¿aún le queda cuerda para rato?
No lo sé. No me planteo lo que va a ser de mí en el futuro. Mientras me encuentre bien y siga disfrutando con el baloncesto seguiré lo que cuerpo aguante o lo que me quieran. No pienso en el futuro, voy día a día.

Ha tenido que ser un año de muchos altibajos en el aspecto emocional: la maternidad, la pandemia, la muerte de Helena Mariño...
Este año ha sido diferente para todo el mundo, es tremendo lo que estamos viviendo por el tema covid. Lo de ser madre te cambia mucho la perpectiva de todo. Para mí antes lo primero era el baloncesto y el baloncesto. Ahora no. Primero está la niña y después el baloncesto. Tus prioridades cambian. Antes ibas descansada a entrenar, ahora igual vas a jugar un partido sin apenas dormir. Es lo que toca. En cuanto a lo de Helena es que no tengo palabras. Cada vez que lo pienso se me ponen los pelos de punta. Puff...Fue tremendo, tremendo.

Jugar al baloncesto en tiempos de covid no será fácil. ¿Cómo se ha adaptado a esta nueva normalidad?
No queda otra que adaptarte y hacer las cosas lo mejor posible. Tampoco puedes vivir sin salir de casa y sin hacer nada. Intento tomar tomas las medidas que sean necesarias y hacer que la vida siga. Tienes que seguir con ella.

Tras la enésima suspensión de un partido por la humedad en Fontecarmoa expresó su hartazgo por la situación en las redes sociales. Parece que Xunta y Concello unirán fuerzas para hacer una fuerte inversión y arreglar las deficiencias del vetusto pabellón. ¿Cree que lo disfrutará en la pista?
Veo difícil que lo viva yo en la pista (risas), pero ojalá todas las generaciones que vienen detrás puedan disfrutar de un pabellón decente. Espero que no quede en nada, como otras veces que también se anunciaron cosas. Espero que esta vez sea de verdad y se tomen medidas porque es un desastre. Ir a entrenar aquí en Galicia que casi siempre llueve y sufrir la humedad, no poder entrenar o hacerlo pendiente de no resbalar para no lesionarte...Yo creo que una ciudad como Vilagarcía necesita un pabellón decente, con tantas niñas y niños y con tanta afición por el baloncesto, qué menos que tener un pabellón a la altura.
 

Sara Gómez Ferreirós: “Una ciudad como Vilagarcía necesita un pabellón decente”

Te puede interesar