Una de las primeras medidas que se adoptó en Ribeira tras la declaración del estado de alarma fue la desactivación de las zonas azules de aparcamiento que hay distribuidas por varios lugares de la ciudad, como el Malecón, Rosalía de Castro, Mariño de Rivera y el entorno del auditorio. De esa manera, el Concello pretendía contribuir al respeto del confinamiento, para que nadie tuviera que salir de sus casas para cambiar su vehículo de sitio. 

Pero, con la puesta en marcha de las dos primeras fases de la desescalada, la apertura de comercios y otros negocios de diferentes sectores, junto con la autorización para que la gente pueda salir a la calle, tanto comerciantes como conductores reclaman que se reactive esa zona azul, para que vuelva a ganar en movilidad de esas plazas de aparcamiento, pues detectaron que están ocupadas a todas horas casi siempre por los mismos coches, lo que obliga a los demás a dar vueltas por toda la ciudad para encontrar un sitio donde estacionar.

Fuentes municipales indicaron que hace bastantes días, en una de las reuniones de la comisión de seguimiento de la evolución del Covid-19 celebradas en el salón de plenos del consistorio ribeirense se abordó ese asunto y se llegó a la conclusión de no tomar ninguna medida, “pois non se percibía a necesidade de regulación do tempo de estacionamento dos vehículos”. Pero, agregaron que, en caso de que cambie la percepción que tienen al respecto y se detecta la necesidad de reactivación de la zona azul para contribuir a la movilidad o rotación de las plazas existentes, o si hay demandas de los sectores afectados, “volverase a estudar”.