Parece que los vikingos llegaron esta año a Catoira cargados de buena suerte y de billetes, que en estos tiempos buena falta hacen. El lunes cayeron 6.000 euros en la Bonoloto. Una nimiez comparado con el Euromillones del martes. La administración de lotería catoirense selló el único boleto de segunda categoría premiado en España y cuyo portador es hoy 556.392 euros más rico. La incógnita es la identidad del nuevo “euromillonario”, que el lunes acudió a la administración y se gastó seis euros en cubrir tres columnas de la quiniela. Los vecinos y también la lotera, Milagros Carneiro, tratan de poner nombre al agraciado, pero de momento sigue en el anonimato. “Eu non son” era ayer la frase más repetida por todos los que se acercaban a la administración y que compartían con Milagros su alegría por haber repartido un premio tan cuantioso. No es el mayor que ha dado, ni mucho menos. En 2010 ya selló una Primitiva premiada con 1,1 millones. “Estoy orgullosa y contentísima” de haber llevado la fortuna a algún hogar. “Para mí es un lujo haber sellado este premio, porque estamos hablando de Catoira, no de Madrid”, dice exultante. Ahora espera que siga la racha y que “las cosas nos salgan bien” en el sorteo más importante del año, el de Navidad. Mientras tanto, toca seguir esperando a que el premiado de la cara. “A lo mejor tiene el boleto en la cartera y ni lo sabe. O no es de Catoira”, ya que en los últimos días la villa recibió a multitud de turistas con motivo de las fiestas.