La piscina municipal cubierta y climatizada de A Fieiteira no reabrirá por ahora sus puertas en la desescalada del estado de alarma y tampoco tiene una fecha para que lo haga. Así lo indicó ayer el alcalde ribeirense, Manuel Ruiz, pues señala que los protocolos establecen que sólo podría ser usada por una persona en cada calle, es decir, un máximo de seis personas a la vez, lo que supone un número muy pequeño si se tiene en cuanta la gran cantidad de abonados y usuarios de dicha instalación, “e eso resulta dificilmente sostible”. Añadió que a esa circunstancia hay que añadir que no se pueden utilizar ni los vestuarios, ni los aseos, ni las duchas, por lo que el mandatario local insiste en que eso “fai que sexa practicamente imposible ter abertas esas instalacións”, precisó Ruiz. Este periodo de inactividad en la piscina lo aprovechará el Ayuntamiento para realizar algunas mejoras en la instalación, principalmente en el pavimento del vestuario femenino.
Si estará abiertas a partir del próximo lunes, día 25 de mayo, las pistas de atletismo del estadio de A Fieiteira, pero deberán respetarse las medidas establecidas en el protocolo para poder entrenar. De igual modo, el Concello está trabajando en la reapertura de otras instalaciones de dicho complejo deportivo, pero siempre supeditada a las medidas de seguridad y prevención actuales y futuras de este proceso de tránsito hacia la nueva normalidad. Es el caso del polideportivo de A Fieiteira, para el que a partir del 1 de junio se prevé un uso distinto del que tenía para entrenamientos y disputa de partidos de competición. Su superficie total de 1.200 metros cuadrados se repartirá en tres zonas iguales gracias a las cortinas divisorias. De ese modo podrá dar cabida a diferentes actividades del gimnasio, por un lado las de bicicleta, como el spinning, las de cardio y las dirigidas o con monitores. Este sistema se tratará de replicar en otros de los polideportivos municipales. La elección de esa fecha responde a que es la misma que decidieron su reapertura los gimnasios privados “e non perxudicalos”, precisó Ruiz.
De igual modo, tal y como ya publicó este periódico, ayer se reactivó la zona azul para favorecer al comercio, pero que en los primeros días no se será estricto en su cumplimiento del tiempo máximo de 90 minutos para aparcar en esas plazas, con independencia de que se pueda alterar o ampliar en el futuro, y de ese manera tratar de favorecer la adaptación de los conductores a la nueva situación. Por otro lado, Manuel Ruiz hizo recuento del diferente material de protección y seguridad que se repartió entre el comercio, como fueron unas 200 mamparas separativas y otras 1.100 pantallas faciales, así como también entre la ciudadanía en general, con la entrega a domicilio de alrededor de 40.000 mascarillas de diferentes tipos.