Amigos: “El sufrir merece respeto, el someterse es despreciable” (Victor Hugo). “Hay algo que Dios ha hecho mal, y estoy recopilando datos” ( Konrad Adenauer). “Hay muchos caciques y pocos indios” (Anónimo). Después de dos meses de hablar sobre lo que ocurre en este municipio de Sanxenxo, por el tema insoluble para los necios, ineptos y mindundis, de los aparcamientos en todo el Concello, caso contrario para otros, que si pueden aportar soluciones, todo sigue igual, bueno es decir peor, el inmovilismo, de la maquina de la casa cuadrada, léase Casa del Pueblo, es ya un caso clínico, e inherente a su capacidad resolutiva de cualquier problemática.
Estar, están, pero se pierden en el marasmo de papeleos, inconsecuentes y en su mayoría de importancia menor, y por tanto, los problemas importante, les hurtan de una capacidad resolutiva y operativa, eficaz. Todo ello,no es un problema de número, que va, es una acción de ideas, de cabezas pensantes, y resolutivas a los principales problemas generales de sus habitantes y guiris circulantes, bueno, algunos de estos guiris, no circulan, hacen acto de fe, y se anotan al senderismo, que es más barato y plancha mas.
Mientras guardan sus automóviles en los garajes privados, o sea las calles, estos van a la playa, se duchan en la misma, realizan, todas las necesidades, corporales en la arena, luego al atardecer, se acercan a sus autos, aparcados, y este les sirve de cuarto de cambio de ropa, vamos de biombo con cristaleras, que además sirve de ventana para otear, el color de gayumbos o del mínimo tamaño de las braguitas, para el viandante que se atreve, y digo bien, lo de se atreve a pasear por la acera, y te miran mal, como si estuvieras invadiendo su intimidad a propósito, no hay intimidad, si realizas cualquier acto en la vía pública, por lo tanto el que pasea tiene todo el derecho y estos guiris ninguno.
En cantidad de ocasiones se les ve comer o merendar también dentro del auto, o sea hacen una vida de ambulantes desde la mañana hasta el atardecer, y el coche y el aparcamiento fijo, en la calle, eso sí, sin mover, ni siquiera dar a la llave de contacto, no vaya a ser que se mueva medio metro y alguien más listo, les trinque su tesoro, que por otra parte es de todos y no de uno solamente. Pero eso sí, más pillo, aquí o eres astuto o te comen los lobos (guiris), si es cierto que vienen con nuevas artes de engaño, en las que los sufridos pobladores, caen como conejos, pero eso sirve también para aprender, la vida es dura y cruel, y el inocente, el bueno, es el tonto, y la verdad que los guiris en esto son verdaderos maestros, y los pobladores somos los indios, que engañan. No es lo de antes, se oye por aquí, que el turismo, vacacional de verano, es más tosco, más atrevido, más impaciente, y sobre todo la educación grupal o social, brilla, pero por su ausencia y a diario se ven amagos de gresca entre unos y otros, o entre ellos mismos. Los unos porque se ven invadidos por legiones de bárbaros, que les hurtan los espacios y los otros por eso mismo por bárbaros, que quieren ocuparlos.
Es digno de estudio esta mezcla de guiris y pobladores, se asemeja en mucho como ya dije a las invasiones de pueblos y aldeas quemando todo a su paso, y organizando un caos porque eso mismo, pero sin quemar iglesia, es lo que ocurre aquí, una invasión gigantesca, que si llueve, no puedes dar un paso sin tropezar con uno, o dos, y si no llueve, pues también. Os estaba contando lo que hacen los ambulantes, estos guiris de medio pelo, luego de cambiarse, acicalarse y alimentarse en su auto de calle, se van tan panchos a lucir palmito al Paseo de la playa de Silgar, con ropa de marca, por fuera y cerebro de ameba andante. Las fotitos con el móvil, para enseñarlas en la oficina después y presumir de haber estado en Sanxenxo en vacaciones, aunque no dicen como, por supuesto.
Si es digno de un estudio-comparativa, sociológico, de las invasiones normandas y demás para darnos cuenta en el lío que nos hemos metido. Os lo dice un invadido, que nunca da un paso atrás. Eso seguro. Viva San Roque y su perro.
Felices fiestas en Vilagarcía. Un saludo amigos.
Saúde e terra.