Parece mentira que en democracia aparezca la palabra pobreza energética causada por la liberalización del mercado de la energía eléctrica que en vez de resultar más económico para el consumidor fue todo lo contrario. Se vendió como la panacea por la libre competencia de los mercados con la excusa de evitar el monopolio que había en España. Pero no conformes ponen precios y condiciones a los gobiernos y por encima le dieron subvenciones y ahora colocaron en sus consejos de administración a exmiembros de gobiernos. Así el libre mercado fue una argucia más de las eléctricas, y no se entiende como siendo la electricidad un producto estratégico, (antes Endesa era propiedad del Estado), los gobiernos la han privatizado y ahora le permiten que sean ellos los que le impongan las condiciones. Las consecuencias son pobreza energética y falta de competitividad de nuestras empresas.
Si Galicia produce más energía que la que consume, con un excedente del 24%, no se entiende como el Gobierno gallego no presiona para evitar ser perjudicados. Y para más inri un secretario de Estado dijo que van a cerrar las térmicas que hay en Galicia cuyas declaraciones fueron desmentidas por el gobierno de España, algo habrá como de costumbre. Llueve sobre mojado ya que también quieren cerrar las plantas de Alcoa, con la construcción naval de capa caída ya nos dirán a dónde vamos a parar con tanta decadencia industrial en Galicia.
Tenemos nichos de nuestros recursos sin explotar pero el gobierno gallego no los ve por falta de planificación y apoyo a proyectos propios, palabra odiada desde la caída del muro de Berlín, pero planificar es prevenir para no seguir desnortados y volver a emigrar allí donde planifican como hicieron los gobiernos vascos que se reinventaron orientando su economía. Recordemos lo que era Bilbao hace unos años que pasó de una industria sucia a una turística-cultural e industrias limpias compatibles. Sea como sea, Galicia desde siglos sigue siendo discriminada con las decisiones de los distintos gobiernos centrales, que como dijo alguien, cuanto más poder tengan los gallegos en Madrid menos tiene Galicia. Así vemos que teniendo un excedente de producción eléctrica creada con nuestros recursos nos sale más cara, y los combustibles, seguros, autopistas, servicios con pensiones más bajas. Mientras los gobiernos de Galicia siguen cantando sus excelencias de buena gobernanza, pero no quieren mandar y nos vapulean con subidas cada poco para pagar las obras y mejoras de la AP-9 especulando con las sucesivas compra-venta de Audasa por foráneos mientras se reparten miles de millones de ganancia y los gobiernos le prorrogan la concesión que caducó en 2012 por lo que hace 6 años que debieran sacar las barreras y pasar gratis tal como fue acordada en la concesión en 1973, pero nuestros elegidos gobernantes le prorrogaron hasta el 2048, luego se echan las culpas unos a otros de tal desfeita. Somos el culo de España y como tal nos tratan.