O Salnés ya puede eliminar nidos de velutina a 200 metros de altura y se prepara para usar explosivos

O Salnés ya puede eliminar nidos de velutina a 200 metros de altura y se prepara para usar explosivos
La presidenta comarcal, el gerente y los dos trabajadores del servicio hicieron ayer balance | mónica ferreirós

La Mancomunidade do Salnés sigue modernizando su servicio de lucha contra la velutina y acaba de incorporar un fusil para perdigones de gel venenoso que permite alcanzar nidos en lugares hasta ahora inaccesibles –tiene un alcance de 200 metros– y ahorrar unos 8.800 euros en costes. Y no es todo, sus dos operarios se han formado en el manejo de explosivos, que es el “futuro” para combatir esta especie invasora e “inteligente” que aprende del depredador humano y cada es más huidiza, llegando incluso a enterrar los nidos.


La erradicación en la comarca es imposible porque siempre habrá movilidad de otros territorios, pero la entidad puede presumir de haber reducido su presencia de manera importante desde la entrada en funcionamiento del servicio, en 2017. Como ejemplo puso Cambados, que pasó de un pico de 549 nidos en 2016 a 126 en 2020. También de su eficacia, pues tal y como indicaron la presidenta, Marta Giráldez, y el gerente, José Ramón García Guinarte, el 95 % se eliminan en 24 horas.


Más de 2.500 nidos retirados

Desde su nacimiento se han retirado 2.500 nidos y se han colocado más de 8.500 trampas, que “é a clave para combatilas” porque eliminar a una reina supone evitar el nacimiento de otros 1.000 ejemplares con posibilidades de generar nuevas colonias. Es por ello que las colmenas también se geolocalizan y ubican en un mapa de calor para conocer sus lugares preferidos para anidar e incidir más en ellos. Habitualmente son las zonas próximas a caudales de agua y por concellos, en 2020 Meis se llevó la palma de mayor número de nidos retirados.


Neutralizaron las bolas

En estos cuatro años sus trabajadores se han ido especializando gracias a formación teórica y sobre todo práctica, además de ir modernizando las herramientas de trabajo: una grúa de 20 metros de altura, un furgón de desplazamientos rápidos, pértigas, drones, un fusil de “paintball”... Y ahora le suman esta carabina que permite pasar de una altura máxima de alcance de 45 metros a los 200, además de usar perdigones impregnados con gel venenoso, más eficaces que las bolas congeladas usadas con la otro arma pues presentaban problemas de conservación y se han encontrado con que las avispas las neutralizaban recubriéndolas con el mismo material del nido mientras que con el gel, en cuanto un ejemplar lo toca lo reparte por toda la colonia. De todos modos, el gerente señaló que el “futuro” pasa por el uso de explosivos y el personal ya ha recibido el curso, solo falta que se regularice su utilización para estos casos y ya está en vías.

Guinarte también explicó que con esta inversión de 250 euros prevén ahorrar 3.200 euros en combustible, porque hace innecesario usar la grúa, así como 5.600 en veneno e insecticidas pues requiere cantidades más pequeñas. “Isto é o que deben buscar as administracións, servizos eficientes”, añadió Giráldez.


Se ofrece en siete concellos porque O Grove tiene el suyo propio y en Vilagarcía solo le colocan las trampas. Cada uno paga 8.280 euros anuales, lo que hace un total de 579.61 euros y, según el gerente, es la mitad del coste en otros lugares. También destacó la eliminación del nido en 24 horas desde que llega el aviso y que incluso se espera mejorar pues con el nuevo fusil no es necesario ni ponerse la ropa de protección. 


Pedrouzo: “Mira se son espabiladas que van a por nós cando nos quitamos a protección”

Chema Pedrouzo e Isaac Padín son los operarios “altamente cualificados” del servicio contra la velutina. Este último es miembro de Protección Civil y ya tenía cierta experiencia tras la entrada de la invasora en Galicia, en 2014, sin embargo, también se han servido de la experiencia de Lolo Andrade, voluntario en Cambre, y sobre todo de la suya propia. El nido más alto hallado hasta ahora estaba a 60 metros, pero la invasora aprende y cada vez iba anidando a mayor altitud. Ahora hasta se mete bajo tierra y ya han tenido que rescatar a algún tractorista en apuros.


Por ver, han visto nidos del tamaño de un contenedor de basura y picaduras también han recibido. “Teño levado algunha, pero sen síntomas”, apuntó Padín. También se han encontrado con varios casos de afectados que han precisado atención médica y advierten de no corren riesgos sobre todo en el caso de los alérgicos.


Señalaron además la capacidad de adaptación de las avispa: “Mira se son espabiladas que van a por nós cando nos quitamos a protección”, apuntó Chema, que es el experto con la mejor puntería cuando utilizan los fusiles de aire comprimido. Su formación es continúa, pero también deben agudizar el ingenio y a veces se encuentran con situaciones nada fáciles como la aparición de nidos en matorrales, bajo tejados, huecos de árboles... También explicaron que en las trampas usan atrayentes respetuosos con otras especies y agradecieron la colaboración de Cabreiroá, que le dona las botellas. 

O Salnés ya puede eliminar nidos de velutina a 200 metros de altura y se prepara para usar explosivos

Te puede interesar