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jueves | 25 abril | 2024
El alcalde de Ribeira, Manuel Ruiz, pretende replicar en la carretera general que atraviesa el núcleo de Castiñeiras, con la implicación de la Diputación de A Coruña y del propio Concello, la recuperación de la identidad urbana ideada por la Fundación RIA, con el arquitecto británico David Chipperfield a la cabeza, para la travesía de la AC-305 en Palmeira. Así lo dio a conocer el regidor local en la visita que realizó a Ribeira la conselleira de Infraestruturas e Mobilidade para dar a conocer que su departamento acaba de sacar a licitación hasta el 4 de mayo, por 262.000 euros del proyecto constructivo de dicha actuación -su plazo total de ejecución es de 21 meses- destinada a humanizar y ganar espacio para los vecinos de Palmeira y cambiar la imagen de la carretera de titularidad autonómica, y que permitirá “transformar unha estrada nunha rúa”, subrayó Ethel Vázquez.
La titular del citado departamento del Ejecutivo gallego, que espera contar con el proyecto constructivo en la primavera de 2022 para luego licitar las obras, detalló que incluirá actuaciones que supondrán la mejora de la movilidad y seguridad viaria, y que supondrá una inversión que previsiblemente superará los 2,2 millones de presupuesto. Vázquez, que se comprometió a que esta intervención tendrá en cuenta la participación vecinal y del propio Concello ribeirense, precisó que se buscará adaptar la configuración de la AC-305 a ña realidad actual de este núcleo de población, para lograr una vía completamente integrada en el “tecido urbano”. Añadió que se actuará a lo largo de un kilómetro con intervenciones para garantizar la seguridad de los peatones y conductores, potenciando el carácter de vía lenta, priorizando la movilidad peatonal y actuando sobre el diseño integral de la calle.
Adrián Capelo, arquitecto del equipo de la Fundación RIA, se refirió concretamente a esas estrategias a desarrollar, entre las que se contempla la reducción de la velocidad máxima en tramo urbano de 50 a 30 kilómetros por hora, la reducción del ancho del carril para reforzar el carácter de vía lenta y ampliación del espacio para peatones, introducción de una franja verde permeable y adaptable, mejora de la accesibilidad y continuidad del espacio público, refuerzo de las conexiones transversales y de prioridad peatonal para permitir una mejor conexión entre ambas márgenes -zonas de plataforma única-, racionalización de los servicios urbanos -tendido eléctrico, saneamiento y otros- e implementación de aparcamientos disuasorios, que el Concello ya habilitó en varios sitios del municipio. Y definió esta actuación como una experiencia piloto para extender a otros cinco tramos de la AC-305, a través de un diagnóstico para su selección, como se recoge en el convenio de la Xunta con la Fundación RIA por 212.000 euros.
