Un exoesqueleto pediátrico permite a un niño con AME dar sus primeros pasos

El Consistorio de Cambados y el Parlamento de Galicia acogieron esta semana sendas presentaciones de un ingenio mecánico que ha permitido dar sus primeros pasos a Thiago, un niño de seis años que padece atrofia muscular espinal (AME). Los actos fueron organizados por GaliciAME, la asociación presidida por la cambadesa Merchi Álvarez.

El aparato que ha permitido lo impensable hasta hace no tanto es el primer exoesqueleto pediátrico del mundo. Fue diseñado por la científica Elena García Armada y desarrollado por Marsi-Bionics, pyme spin-off del CSIC. Fue hace solo unas semanas, en un acto con el ministro de Ciencia e Innovación, Pedro Duque, y la presidenta del Consejo Superior de Investigaciones Científicas, Rosa Menéndez, cuando se anunció la obtención del marcado CE de este dispositivo.

Este exoesqueleto “representa una de las mayores esperanzas en el tratamiento de la AME”. La terapia con él “tiene un impacto directo sobre los principales problemas de salud” derivados de la enfermedad y “puede lograrse un 50% más de esperanza de vida y con unas cotas en su calidad antes impensables”, valora la empresa.

Desde GaliciAME señalaron que cuando nacieron como colectivo “no nos podíamos ni imaginar que esto fuera posible”. Un “momento histórico” que los llena de esperanza y gratitud, también para todos los grupos políticos, que se interesaron por este avance.