La Policía acude al Liceo por otro conflicto entre asociados, Arousa Moza y Ravella

La Policía acude al Liceo por otro conflicto entre asociados, Arousa Moza y Ravella
Los jóvenes de Arousa Moza tuvieron que pedir mobiliario a asociaciones y otros concellos para realizar el bingo | m. ferreirós

Una vez más -y ya van varias- la Policía Local volvió a acudir ayer a las dependencias del edificio del Liceo, en la calle Castelao. Lo hizo después de que socios de la entidad les llamasen advirtiendo de que los jóvenes de Arousa Moza estaban celebrando su sesión semanal de bingo para mayores sin autorización. “No es así”, zanjó el presidente del colectivo juvenil Arousa Moza, Borja Santamaría. “Tenemos permiso de la Secretaría Xeral de Xogo e Espectáculos Públicos y se cumplen escrupulosamente todas las medidas sanitarias requeridas en este momento”, amplía.

Y es que los momentos de tensión que se vivieron al filo de las seis de la tarde entre los jóvenes y los miembros veteranos del Liceo no fue más que el desencadenante de una situación que se ha venido gestando en los últimos meses y en la que el Concello -según denuncia Arousa Moza- también tiene un papel protagonista.

El colectivo juvenil señala que desde Ravella se han enviado comunicaciones a la Xunta de Galicia “intentando que nos retiren el permiso” para la celebración de actividades tales como el citado bingo, talleres o ludotecas entre otras. Un intento que, apunta Santamaría, “no ha fructificado”. Arousa Moza pone nombre y apellidos a los que, “al no conseguirlo por vía institucional, buscan expulsarnos de otra forma”. 


Dicen que Tania García amenazó al extesorero del Liceo de que si no los echaban se quedaban sin local 



Dicen desde el colectivo que “el extesorero del Liceo Casino, don Gustavo Rolán, nos informa de una llamada recibida por Tania García -tenienta de alcalde y concejala de Servizos Sociais- en la que le comunica que si el Liceo no detiene la actividad de Arousa Moza el Concello tomará represalias contra el Liceo dejándolos en la calle y sin alternativa de ningún otro local”.

Lo cierto es que los jóvenes tuvieron que echar mano ayer de la ayuda de particulares, de concellos y asociaciones vecinas para que les dejasen mobiliario para celebrar el bingo de los viernes. Horas antes, denuncian, “empleados municipales irrumpieron en las instalaciones sin notificación previa ni permiso alguno accediendo a dependencias en las que se guarda material y documentación privada y llevándose material que había sido cedido por el Concello y otro de propiedad privada”. Algo que, dicen desde Arousa Moza, denunciarán ante las autoridades competentes. El problema es que se quedaron sin sillas para que los mayores que acuden desde hace dos años al bingo pudiesen sentarse. “Tuvimos que andar pidiendo favores para que nos las dejasen”, relata Santamaría. Los jóvenes aseguran que han recibido “amenazas por parte de los socios del Liceo” y que sienten “temor a represalias y daños a nuestra integridad y propiedades”.

En un comunicado Arousa Moza dice lamentar la situación de enfrentamiento y apunta que la situación es “provocada por las presiones y negociaciones con bienes públicos que el Concello lleva realizando en los últimos meses buscando la confrontación vecinal”. 

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